Laín el Bastardo

Era huérfano, y bastardo, pero su ilusión estaba clara: que cuando su padre, don Rodrigo Seijas, señor de San Paio, volviera de las Cruzadas, estuviera orgulloso de él. Por eso había escalado el roquedal hasta conseguir un polluelo de halcón, que criaría para regalárselo. Pero las malas noticias llegaron al fin: don Rodrigo no iba a volver. Y ahí empezó todo. Expulsado a golpes por su hermanastro, será acogido por Guy de Tarba, infanzón fiel al señor de la villa y, con él, Laín se embarcará en un viaje lleno de peligros y aventuras. Desde Galicia, pasarán los Pirineos y, ya en Venecia, embarcarán hacia la Palestina y allende ultramar. Perseguido por los templarios, será traicionado, embaucado, torturado…, pero se convertirá en un hombre, en un héroe. Y lo mantendrá vivo una única esperanza: la venganza.

Como si fuera una cantiga moderna, Martín Códax nos relata la historia de Laín, el bastardo de de San Paio; la gesta del halconero, una historia de aventuras, conspiraciones y honor, sumergida en la época más turbulenta del medioevo europeo, desde la España de Alfonso X el Sabio hasta las lejanas tierras de Mongolia, donde la sombra del gran Gengis Kan sigue enmudeciendo a vivos y a muertos.

Ediciones

Edición Editorial Páginas ISBN Observaciones
2018 Edhasa
768
978-84-350-6315
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Comentarios

Imagen de JavierCanals

Francisco Narla es un narrador sensacional. No sólo en las novelas largas como Ronín o Assur, sino también y precisamente en otras obras más cortas como Donde aúllan las colinas. En Laín: el bastardo, Narla se atreve nada menos que con el Siglo XIII. Reinado de Fernando III y Alfonso X, varias cruzadas con poco éxito, la hegemonía de los turcos en el Oriente Medio, amenazada por los mongoles de Gengis Kahn. A esto se suman intrigas, órdenes militares, implicaciones diplomáticas, tráfico de reliquias y algo así como un tímido primer Renacimiento en Europa y grandes cabezas como Alberto Magno y Tomás de Aquino, por citar sólo las occidentales.
En medio de este escenario, Narla sitúa a Laín, hijo bastardo del Señor de San Paio en la provincia de Lugo. La vida que puede esperar en esos años un joven nacido en esas circunstancias no es muy halagüeña. Por eso, y por cumplir el juramento a su padre cuando éste se pone en camino hacia Palestina, el despierto galleguiño se embarca en una aventura que lo lleva por una gran parte del mundo conocido, impulsado por el honor, por la venganza y, finalmente, también por el amor.
Con todas las reservas normales a una novela histórica, especialmente en unos siglos que nos han dejado pocos documentos y muchas incógnitas, se disfruta leyendo este libro, presentado como relato de un juglar mujeriego que está siempre a la búsqueda de historias y mujeres.
Muy buena novela, con un pequeño borrón a mi modo de ver. Al comienzo de la Estrofa XI incluye una descripción pornográfica de la iniciación viril del muchacho. Unas páginas innecesarias que me impiden recomendar sin reservas esta obra.

Imagen de polvorista

Larguisima novela que quiere ser histórica y muy ambiciosa porque trata de recoger casi todos los acontecimientos del Siglo XIII. Partiendo de la historia de un chaval, Laín, bastardo de un Señor gallego de San Paio recoge hechos de los templarios, luchas de güelfos y gibelinos, sectas musulmanas, guerras de la iglesia por las reliquias de tierra santa, etc., en la época de Alfonso X, el sabio. Como historia de aventuras es muy entretenida aunque sólo refleje la parte menos ejemplar de la iglesia.