Historia de las ideas

 

El profesor de Historia de las ideas, Pedro Carlos González Cuevas, de la UNED, ha reeditado su investigación sobre la evolución de las ideas políticas de la llamada derecha española. En la introducción a la versión actualizada de su trabajo que publicó en el 2005, recoge algunas de las críticas que suscitó su obra en el ámbito científico, político, cultural y periodístico, y señala la explicación de los cambios que ha realizado en esta nueva versión que denomina “corregida y aumentada”.

Verdaderamente, hay que reconocer que el trabajo ha mejorado respecto a la anterior edición, sobre todo en la narración  de la época más reciente, pero sigue siendo muy problemática en los hechos de hace más de cincuenta años. Quizás la diferencia estriba que para lo de ayer le basta la crónica rápida y los titulares de la prensa y, en cambio, para lo de antes de ayer se requieren más documentos y revivir épocas que no ha vivido y, por tanto, análisis más ponderados.

Precisamente el autor afirma en la introducción de su trabajo que: "la tarea del historiador de las ideas es mostrar, ante todo, la forma en que éstas actúan recíprocamente con la realidad social y política. Solo puede interpretarse una tradición ideológica, saber lo que significa, en su contexto socio-histórico y cultural" (20).

Hay cuestiones muy importantes como la actuación del rey Juan en el manifiesto de Lausana, que el autor denomina precipitado (172), que merecería ser matizado, así como los preceptores que tuvo el príncipe.

También es muy discutible la importancia que se ha atribuido al CSIC de los años cuarenta, pues en realidad la tuvo y mucha en el ámbito científico, pero que dio sus frutos años después y sobre todo colaboró en la reconstrucción del país. Respecto al mundo de las letras, más bien fue catalizador de ideas (173). Desde luego al autor necesita estudiar y entender mejor la Iglesia y los problemas teológicos que se plantearon en los años cincuenta y sesenta y el significado del concilio Vaticano II, en su vertiente cultural, pues eso explica muchas cosas que sucedieron, entre otras el llamado "fenómeno de la contestación".

En ese sentido el juicio acerca del Opus Dei está lleno de lugares comunes, frases hechas y muy escasas lecturas (174-175). No ha leído más que por encima lo que cita (nota 33), pues no ha captado el respeto a la libertad en las materias de pensamiento, políticas, etc., y enseguida establece un grupo de acción política y cultural en el que los nombres, en su mayoría, no son del Opus Dei, sino personas situadas en una línea de pensamiento muy generalizada en la cultura de la época. Colocar a Camino entre los libros del conservadurismo autoritario (294), quiere decir que ni lo ha leído, ni lo ha valorado en su contexto, pues es exactamente lo contrario de lo que sucedió; pues leerlo era lo moderno en los años cincuenta. Un trabajo, por tanto, que requiere seguir revisándose y documentándose en el tardo franquismo y hasta la transición.

José Carlos Martín de la Hoz

Pedro Carlos González Cuevas, El pensamiento político de la derecha española en el siglo XX. De la crisis de la Restauración. (1898), a la crisis del Estado de partidos (2015), ed. Tecnos, Madrid 2016, 306 pp.