La afectividad

Importancia de la afectividad en la vida del espíritu. Raíces psicológicas y éticas. Manifestaciones de la conducta afectuosa.

Ediciones

Edición Editorial Páginas ISBN Observaciones
2008 Ediciones Internacionales Universitarias
115
978-84-8469-223-2

Subtítulo (innecesario): "Los afectos son la sonrisa del corazón".

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Desde “Psicología abierta” de Torelló no había vuelto a leer un libro tan positivo como éste de Miguel-Ángel Martí. Tanto que uno se pregunta si realmente es posible vivir tal como lo plantea el autor o sólo nos está dando una visión parcial de la vida del hombre. Para el autor el mundo de los afectos es constitutivo de la naturaleza humana; un mundo amplio que se inicia con el amor a uno mismo: la autoestima; continúa con el agradecimiento por los dones recibidos, especialmente el don de la vida y todos aquellos que derivan de éste; sigue por la valoración de la belleza que hay que en la naturaleza y la literatura (el autor se refiere concretamente a la poesía), y concluye con la apreciación que sólo el hombre o la mujer son dignos de amor; cualquier otro objetivo, por ejemplo las riquezas, se queda por debajo de lo que es digno de ser amado. Martí aplica palabras hermosísimas al silencio, a la sonrisa y a tantas otras manifestaciones afecto. Una de las aportaciones de este libro consiste en vincular el afecto con la autoestima: “Para querer a los demás es necesario antes quererse a sí mismo” –escribe el autor. También da importancia a la lectura ya que si la vida es búsqueda y dicen que “todo está en los libros”, renunciar voluntariamente a leer es cerrarse puertas detrás de las que pude estarnos reservado un trozo de felicidad. El autor previene contra las ideologías del “complimiento del deber”, como si pudiera residir en éste el objetivo global de la existencia, y considera el “perfeccionismo” como una forma de neurosis que para nada aprovecha. Para el autor una persona que no base su vida en los afectos es una persona espiritualmente muerta.