observación

A Javi no le gusta nada que sus padres le hayan dejado con sus tíos en un caserío perdido en medio del monte. Piensa que será muy aburrido, pero se llevará una gran sorpresa.

Su primo Iker y su tío Aitor le van a descubrir cosas que no habría imaginado ni en sueños. Como es un gran detective, irá llenando su cuaderno de campo con sus descubrimientos y observaciones para poder contárselo a sus compañeros a la vuelta del verano. ¡No se lo van a creer! 

En las selvas viven millones de animales, y en las ciudades también. Hay animales bajitos, altos, gordos, delgados, callados, parlanchines, verdes, amarillos...

Álbum ilustrado, protagonizado por una ranita que quiere servir de modelo en los cuadros de Monet. De esta forma, se muestra la producción pictórica del gran maestro del impresionismo francés (1840-1926), especialmente durante la etapa en que se instaló en Giverny, pequeño pueblo de Normandía, cuyos paisajes enamoraron al artista por la belleza de sus jardines y estanques. El texto, muy breve, está escrito con la estructura de un cuento infantil, aunque lo más destacable del libro son las ilustraciones, de gran formato y excelente realización.

Este es uno de los cuatro libros pertenecientes a las cuatro estaciones. LLega el otoño y, a través de las imágenes, se describe el paisaje otoñal y las frecuentes lluvias. Hay gran variedad de personajes que viven sus diferentes historias.

Despertar la curiosidad, fomentar la observación y propiciar la reflexión son las tres condiciones Faraday se fijó a la hora de escribir las seis conferencias que componen este delicioso libro. Sólo faltó nombrar una última: ejercitar la imaginación. Y es que al lector que se adentra en esta obra le sorprende tanto la materia del libro como la capacidad que tiene el autor para, a partir de un ejemplo cotidiano y concreto, transmitirnos iguales dosis de pasión y de saber.

Los poemas reunidos en este volumen sintetizan más de medio siglo de dedicación a la poesía y vienen a decirnos que no hay diferencia, palabra mediante, entre hallar nuestro lugar en el mundo y que el mundo encuentre un lugar entre nosotros.

Cartas Marruecas constituyen la primera manifestación en las letras españolas del ensayo breve, incisivo e irónico, tan en boga en Europa. La crítica brota aquí de una observación directa de las costumbres y el carácter de los españoles y, evitando tanto las generalizaciones como el deslumbramiento sistemático por lo europeo, Cadalso logra configurar un retablo realista alumbrado por un patriotismo inteligente.