Roger Lawrence acoge a una niña huérfana de la que poco a poco irá enamorándose. Después de escuchar un disparo, Roger Lawrence descubre el cuerpo de un hombre al que había negado su ayuda. A su lado está la hija del fallecido, y arrastrado por la compasión y remordimiento, decide adoptarla. A medida que la niña florece, Roger la mira como una posible candidata a convertirse en su mujer.