Al cruzar el puente

En este libro veremos un desfile de personajes reales, desde los “descartados”, socialmente hablando, hasta los voluntarios de una y otra manera. Paseando por este barrio de Madrid, descubriremos algo sorprendente. ¿Qué ha pasado para que el antiguo mendigo del callejón sea ahora un evangelizador lleno de fuego? ¿Cómo se convierte un triste borracho en un santo feliz? Haciéndose eco de la llamada universal a la dignidad del ser humano, especialmente del más necesitado, tantas veces desatendido en sus necesidades espirituales, el autor describe su modo de actuar, iluminando vidas rotas, ayudando a poner soluciones a lo que parecía imposible, pidiendo no solo al Autor de la Vida, sino tb a los demás.

En estas páginas se nos anima a cruzar el puente que nos puede unir a los demás, a los que sentimos alejados, a los que nos cuesta tratar, a los que nuestra sensibilidad rechaza, a los que nos parecen perdidos, a los que no nos gustaría que entraran en nuestra casa, a los que dan lástima pero por los que nada hacemos.

El misterio del otro nos espera, tan solo falta dar el primer paso.

 

Ediciones

Edición Editorial Páginas ISBN Observaciones
2019 Palabra
443
978849061-801-1

Subtítulo: Testimonios de una iglesia abierta a todos

Valoración CDL
3
Valoración Socios
4
Average: 4 (2 votes)
Interpretación
  • No Recomendable
  • 1
  • En blanco
  • 2
  • Recomendable
  • 3
  • Muy Recomendable
  • 4

2 valoraciones

4
4
Género: 

Comentarios

Imagen de Pipa

Magnífica obra testimonial de un sacerdote católico destinado como párroco  en san Ramón Nonato, iglesia situada en un barrio del sur de Madrid: el Puente de Vallecas.

De un modo progresivo y muy ameno el autor juega con el término “puente” porque toda su obra describe no solo a un barrio pobre de la capital, sino el arte  de tender puentes hacia los demás, sean quien sean éstos. Nos habla de una Iglesia que prolonga con obras y palabras la tarea de enseñanza y vida que hizo Jesús viviendo en este mundo, que culmina en su Pasión y Resurrección.

A través de la Iglesia llegan hoy al hombre los frutos de la Redención, la caricia de Dios hacia sus hijos. Recalca desde el valor de la oración, hasta la dádiva y el acompañamiento.

Un libro ameno, vivo, emocionante, práctico a la vez, sabio.

Manifiesta la Esperanza en cada ser humano: los pobres piden. Pero los pobres también dan.

Describe experiencias evangelizadoras y motivadoras. Muy positivo.

Desde su llegada a su barrio y sus sueños primitivos: ¿cómo serían sus vecinos? ¿Cómo le recibirían? ¿qué podría hacer él por sus necesidades?...Toda la incertidumbre en una maleta.

Unido a la llamada del Papa  a  atender a todos, se puso manos a la obra. Y así comienza su aventura. Cientos de anécdotas vibrantes, sorprendentes, y sus breves pero jugosas reflexiones, dan vida de una forma original, a la propia vida.

Liga cada capítulo a una película, de modo que su tema principal marca la selección de los hechos descritos. Literariamente quizás no sea el culmen de la literatura. Sin embargo su positividad, en momentos tan aparentemente tenebrosos y desesperanzados, es un punto de luz, de esperanza, de valor de la vida –de cada vida-, es una llamada a ponerse las pilas y colaborar en sacar este mundo adelante, cada uno con lo que puede. Nadie da de lo que no tiene. Describe muy bien el valor cristiano del voluntariado. También para pedir ayuda que supera todo el egoísmo e individualismo que hay hoy en día.

En definitiva, creo que es un muy buen libro que puede ayudar a muchas personas, empezando por párrocos, trabajadores sociales, profesores, voluntarios y en general a cristianos y hombre de buena voluntad. Con el cambio de actitud personal, entre todos, podemos lograr el cambio de muchas vidas a bien.