El hombre perdido

Dos hermanos se reencuentran tras varios meses sin verse en la frontera de sus vastas propiedades ganaderas bajo el implacable sol de Queensland, una zona aislada de Australia donde el vecino más cercano vive a horas de distancia. Están en la tumba del ganadero, un punto de referencia tan antiguo que nadie recuerda ya quien hay enterrado ahí. Hoy, la escasa sombra que proyecta ese jalón en el camino ha sido la última esperanza para su hermano mediano, Cameron, que yace muerto a sus pies.

Nadie puede entender por que este salió solo bajo ese sol de justicia, dejó el coche y caminó hasta la tumba. Mientras los Bright lloran su perdida, empiezan a levantarse las sospechas: ¿cómo murió? ¿Decidió dirigirse hacia su propia muerte?

Ediciones

Edición Editorial Páginas ISBN Observaciones
2021 Salamandra
384
9788418363504
Valoración CDL
2
Valoración Socios
2
Average: 2 (1 vote)
Interpretación
  • No Recomendable
  • 1
  • En blanco
  • 2
  • Recomendable
  • 3
  • Muy Recomendable
  • 4

1 valoraciones

2
Género: 
Tema(s): 

Comentarios

Imagen de Porto

Jane Harper (Manchester 1980), angloaustraliana, es conocida por dos novelas anteriores: Un año de sequía y Naturaleza salvaje, ambas ambientadas en Australia. Ahora llega la tercera, también ambientada en la misma isla, pero en un paisaje distinto que es el desierto de Queensland, y en las navidades, aunque con unas temperaturas extremas que llegan a los 49 grados, y siempre la misma constante: la fuerza de la naturaleza que hace a los hombres especialmente duros y mentalmente difíciles.

Después de describir un lugar inhóspito donde está la llamada tumba del ganadero, comienza el relato con el hallazgo del cadáver de Cameron Bright junta a ella, a unos nueve kilómetros de su coche. ¿Cómo es posible que un nativo de aquellos lugares aparezca muerto deshidratado, conocedor perfectamente de como hay que comportarse en esas circunstancias? El enigma de su muerte va a recorrer toda la novela: nunca se dice que ha sido asesinado, pero todos son conscientes de que así ha debido de ser.

Y van entrando los personajes en escena: sus dos hermanos, Bud y Nathan con su hijo Xander, la madre, Liz, Ilse, esposa de Cameron y dos niñas y de acompañamiento, el conocido como tío Harry, empleado de confianza de la familia y dos mochileros ingleses: Katy y Simon contratados para ayudar en la propiedad. El paisaje: enormes extensiones prácticamente desérticas donde los vecinos están a tres o cuatro horas de viaje, un pequeño pueblo también muy distante y sobre todo un calor insoportable, ganado y caballos.

El núcleo de la novela va a ser descubrir el enigma de la muerte de Cameron, pero lo realmente importante es la historia de esta familia y sus relaciones partiendo del marido de Liz, Carl, padre de los tres hermanos y que siempre está presente. El desenlace final, que se producirá después del entierro en la misma propiedad de Cameron, es bastante insospechado, pero muy lógico. Las relaciones entre cada uno de ellos, la descripción de sus caracteres, de su mundo, de sus miedos, de sus frustraciones y sobre todo de lo inconfesable de algunos, mantiene un gran tono de intriga. Entre todos destaca Nathan, que es el mayor y las interesantes relaciones con su hijo adolescente, que vive habitualmente con su madre. La idea de como un padre y la tierra puede modelar una personalidad está muy bien perfilada. También son muy buenas las descripciones de las dos niñas, importantes para seguir el relato y que son la dulzura en un ambiente muy duro e individualista, donde no hay ninguna referencia trascendente y todo transcurre pegado a un terreno humano poco atrayente, amoral, donde los sueños son siempre muy poca cosa.

Bien escrita, se lee con gusto, no aburre, y es evidente que la autora ha ido avanzando en su técnica narrativa y en el planteamiento de argumentos.