Al cumplirse el cincuentenario de la publicación del primer libro de la escritora mallorquina Carmen Riera (de la Real Academia), Alfaguara reedita le verasión en castellano de estos relatos de tema variado.
Carmen Riera es autora bilingüe en catalán y en castellano. Cincuenta años después, se reedita su primer libro, escrito en catalán y traducido más tarde al castellano, que es la versión que ahora se ofrece. La prosa de la escritora mallorquina es muy elegante y cuidada, poética a veces. Casi todos los relatos transcurren en Baleares, cuando el turismo aún no se había adueñado de las islas. Un mundo más bien cerrado, en el que se notan las primeras grietas por los cambios en la sociedad y que afectan a las relaciones entre padres e hijos, entre profesores y alumnos, etc., lo que da pie a tensiones, pequeños escándalos, con final unas veces trágico y otras más bien cómico. Algunos relatos son muy breves, ocupan apenas una página, y tienen un tono más intimista y simbólico. En otros, se refleja muy bien el ambiente de aquellos años y me han parecido muy logrados los últimos, agrupados con el título de Bestia de carga, carne de cañón, de tono más realista y sobre temas sociales, en los que, además, se reproduce el habla popular de los mallorquines, cuando intentan expresarse en castellano, que algunos han calificado como "castellorquín". En algunos, se presenta la práctica cristiana como cosa de beatas, tal vez por el ambiente un tanto cerrado y clerical de entonces. Luis Ramoneda
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Carmen Riera es autora
Carmen Riera es autora bilingüe en catalán y en castellano. Cincuenta años después, se reedita su primer libro, escrito en catalán y traducido más tarde al castellano, que es la versión que ahora se ofrece. La prosa de la escritora mallorquina es muy elegante y cuidada, poética a veces. Casi todos los relatos transcurren en Baleares, cuando el turismo aún no se había adueñado de las islas. Un mundo más bien cerrado, en el que se notan las primeras grietas por los cambios en la sociedad y que afectan a las relaciones entre padres e hijos, entre profesores y alumnos, etc., lo que da pie a tensiones, pequeños escándalos, con final unas veces trágico y otras más bien cómico. Algunos relatos son muy breves, ocupan apenas una página, y tienen un tono más intimista y simbólico. En otros, se refleja muy bien el ambiente de aquellos años y me han parecido muy logrados los últimos, agrupados con el título de Bestia de carga, carne de cañón, de tono más realista y sobre temas sociales, en los que, además, se reproduce el habla popular de los mallorquines, cuando intentan expresarse en castellano, que algunos han calificado como "castellorquín". En algunos, se presenta la práctica cristiana como cosa de beatas, tal vez por el ambiente un tanto cerrado y clerical de entonces. Luis Ramoneda