Evocaciones y presencias

 

Este es el sugerente título escogido por el que el comité encargado de la publicación del legado literario del poeta, escritor y periodista José Jiménez Lozano, premio Cervantes 1992, representante de la generación del final del siglo XX, testigo de la transición y punto de referencia de las letras castellanas, para entregar al gran público y a los seguidores del autor, las últimas notas del diario que llevaba desde el comienzo de su vida profesional hasta los últimos días de su vida literaria, espiritual y humana.

Efectivamente, Jiménez Lozano es una de las grandes figuras que se han ido en estos meses desde que comenzó la pandemia y, por tanto, valía la pena terminar de editar, aunque fuera como último adiós, los cuadernos y notas de un diario que comenzó en los años sesenta del siglo pasado.

Es claro que la cultura occidental será distinta desde el momento en que termine la dichosa pandemia, pues, entre otras cosas, nos faltarán los libros y los enjundiosos comentarios de nuestros sabios escritores, filósofos y poetas muertos en este terrible año.

La edición de estos comentarios socarrones y agudos del castellano viejo Jiménez Lozano, nos servirán, por tanto, para recordar los sucesos y actuaciones inmediatamente previos a la pandemia y no servirán de antecedente para entender las reacciones de los políticos, de los intelectuales, de los sociólogos, médicos, sanitarios, ante un hecho tan insólito como inesperado, pues confiábamos demasiado en la unidad de mando de las autoridades sanitarias de la comunidad europea y ya se ve que, fuera del orden económico, todavía queda en Europa mucho que enfocar e integrar.

Sabiendo de donde veníamos, entenderemos al alto grado de civismo y responsable reacción del pueblo soberano, pero también podremos aprender que de aquellas arenas vinieron estos lodos: falta prestigio y autoridad moral para que se cumplan los tratados internacionales.

Asimismo, en nuestro país los políticos gobernantes, en muchas ocasiones, les ha faltado visión de estado, del bien común y de servir a todos, y les ha sobrado visión política partidista, para reaccionar.

Desde luego, vale la pena leer al perspicaz y chispeante Jiménez Lozano juzgando la vida española de finales del 2019 y comienzos del 2020, para imaginarnos lo que hubiera anotado de marzo  del 2020 en adelanto. 

Ojalá que la lectura de este libro nos haga a todos aprender a actuar, en adelante con más inteligencia, visión de conjunto, sentido común y visión cristiana de la vida, pues vivimos indudablemente en las manos de Dios, como recalca el escritor Jiménez Lozano.

José Carlos Martin de la Hoz 

José Jiménez Lozano, Evocaciones y presencias. Diarios (2018-2020), Madrid 2020, 357 pp.