Jürgen Habermas

 

La biografía que presentamos sobre el filósofo alemán más importante del momento, Jürgen Habermas (1929), supera los límites de una semblanza corriente, hasta convertirse en una panorámica del pensamiento filosófico en Alemania, desde la segunda guerra mundial hasta nuestros días.

Para captar el tono, el argumento y el estilo de la obra del prof. Müller-Doohm (1945), sugerimos leer despacio el amplio espacio que se concede a las turbulentas relaciones entre el viejo maestro Max Horkheimer, recién regresado del exilio, y el joven Jürgen Habermas, al que persigue y defenestra sin haber hablado con él, por sospechar que era un verdadero marxista y revolucionario. La mediación de Theodor W. Adorno, fue clave y, sobre todo, fue fundamental para el cambio radical de posturas y la final reconciliación, el hecho de la propia evolución del pensamiento de Habermas hasta aceptar críticamente el socialismo democrático (99-148).

Las siguientes páginas hasta el final del trabajo, serán una confirmación del grado de certidumbre y de honradez intelectual con la que el autor ha ido expresando la evolución del pensamiento filosófico de Habermas, quien ha continuado progresando en el mismo de modo incansable, primero en la Universidad de Fráncfort y, luego, como emérito hasta la actualidad.

Una cuestión clave, verdadero hilo conductor, de su pensamiento sociológico y filosófico desde finales de los años sesenta del siglo pasado es la progresiva sustitución en el mundo académico de la “filosofía de la conciencia” por la “problemática del lenguaje” (154-155). Efectivamente, los trabajos en la filosofía del lenguaje le llevaron muchos años de esfuerzos e ilusiones que están condensados en su obra “observaciones preparatorias para una teoría de la competencia comunicativa” (160).

De hecho, con el paso de los años el pensamiento de Habermas va evolucionando. En 1979 decía uno de sus discípulos: “se ha apartado del concepto de racionalidad de Adorno, que era el concepto típico de la filosofía de la conciencia, para desarrollar su concepto de razón basado en las estructuras de una intersubjetividad que se trasmite mediante el lenguaje” (221). En 1981 se publica su obra culminante “teoría de la acción comunicativa” en dos volúmenes (241).

Es muy interesante, abordar la lectura de esta extensa obra con detenimiento pues su objetivo es conocer filosóficamente al hombre más importante en la filosofía alemana en la actualidad y quien más ha impulsado la apertura a la trascendencia en la filosofía y el pacto por una ética común, por señalar algunas aportaciones: “las religiones que ofrecen un camino de salvación y prometen la redención sin importantes impulsoras del proceso de autodefinición ética (…), hay que tomar en serio las manifestaciones de los creyentes como contribuciones dentro de una esfera pública plural” (429).

Es particularmente interesante, pues marca un cambio de nivel de diálogo fe y razón, el encuentro de Múnich entre Habermas y el entonces cardenal Ratzinger sobre moral y derecho en la sociedad democrática (430-435).

José Carlos Martín de la Hoz

Stefan Müller-Doohm, Jürgen Habermas. Una biografía, Trotta, Madrid 2020, 642 pp.