La Gran Vía de Madrid

 

Desde hace muchos siglos Madrid, la capital del Reino, se ha ido conformando como la auténtica y señorial sede de la Villa y Corte, que surgió de unión de los reinos de Castilla, León, Navarra, Aragón, y Granada, a través de reyes católicos, en el nacimiento el siglo de oro de las letras castellanas y en la aplicación de la reforma de la Iglesia tras el Concilio de Trento.

Esos sencillos hechos y tantos otros son como las raíces de un pueblo que progresa, que se expandió por el mundo entero y que asumió a gentes llegadas de todas las partes del mundo para adentrarlas en proyectos económicos, sociales, culturales y religiosos que han derivado en un país moderno, cristiano, de corazón y de alma abierta a las ideas concordes con la dignidad de la persona humana.

En la Gran Vía de Madrid, cerca del cruce con la calle Alcalá, arranca la calle del Caballero de Gracia, donde está enclavada una joya arquitectónica y de fe que es el Real Oratorio del caballero de Gracia que da culto al Santísimo Sacramento desde el siglo XVII y donde descansan los restos del fundador de la llamada cofradía de los indignos esclavos.

Hace pocos años (2019) en ese Oratorio se clausuraba el proceso diocesano del Caballero de Gracia, Jacobo Gratji que fue presidido por el Eminentísimo Cardenal de Madrid, Carlos Osorto, en un acto muy emotivo donde los miembros del tribunal nombrado por su eminencia juró haber cumplido con su deber e hizo entrega de las cajas que contenían el Trasunto y la Copia Publica, mientras el Arquetipo quedaba guardado en el Archivo de Palacio (5).

Efectivamente esas cajas lacradas y “el sobre de las letras” fue llevado por el portador a la Congregación romana de las Causas de los Santos donde fueron estudiadas y, felizmente, la Congregación emitió el Decreto de Validez (2020). Poco tiempo después fue confirmado por la Congregación el Postulador Romano y en breve se nombrará el Relator de la Congregación, para que ambos puedan redactar la Positio sobre la vida, virtudes y fama de Santidad del Siervo de Dios y así se irán dando los pasos que la Iglesia tienen formalizados según la Instrucción “Sanctorum Mater”.

La pregunta que quedaba en el aire aquella tarde del 2019 era ¿Cuál era la misión del Postulador diocesano y del pueblo de Madrid una vez concluido el proceso diocesano? La respuesta es clara: difundir por el mundo entero a miembros de la Congregación Eucarística y parroquianos y que llegue a otras fieles de la Iglesia Universal.

Precisamente, como un instrumento más para facilitar esa expansión espontanea de la fama de santidad y favores, está difundir esta sencilla biografía que ahora presentamos, donde de manera muy grafica y sencilla se presenta a un hombre de solidas virtudes cristianas cuyo amor a la eucaristía y a la confesión (22) y por otra parte como alguien verdaderamente preocupado por los más necesitados y por el crecimiento de las instituciones de la Iglesia puede ser modelo para nosotros de amor a Dios y a la Iglesia.

José Carlos Martín de la Hoz

José Ramón Pérez Arangüena, El Siervo de Dios Jacobo de Gracia, editrice Velar, Roma 2022, 49 pp.