La opinión pública



El concepto opinión pública
o simplemente lo público, lo que opina la gente, es el tema de esta interesante
investigación histórica desarrollada por el Prof. Van Horn.
Como es sabido este concepto, ahora tan habitual, se desarrolló en el siglo
XVIII en Francia, Inglaterra y Alemania y desde allí fue llenando toda Europa y
América hasta nuestros días hasta estar plenamente globalizado.


Así pues este libro habla de lo público y de la aparición
de lo público en el siglo XVIII, pero sin realizar transposiciones a la actualidad. La
descripción de lo público la tomará el autor del célebre Schiller: "El público
lo es todo para mí; mi escucha, mi soberano, mi amigo fiel. A este tribunal y
sólo a este, me someteré" (p.16).


Seguidamente Van Horn establece
que lo público serían: "hombres y mujeres con los suficientes bienes y
educación, para disfrutar del acceso regular a los periódicos, novelas y demás
productos de la cultura impresa del siglo XVIII" (p. 17).


Para ambientar esa definición el autor nos recuerda que 1780
sólo en Londres existían 35 clubs de debate (p.59) y en París muchas casas
particulares, llamadas Salones, donde una vez a la semana se desarrollaban
coloquios interminables bien regados de buenos vinos y extraordinarias cenas. La
influencia de ese público que iba tomando conciencia de su libertad de
expresión, la subraya VanHorn afirmando que el propio Parlamento
francés terminó por ser "víctima del público que contribuyó a crear" (p. p.71).


Así pues, con el paso del tiempo cada vez había más gente
que leía y además leían mucho (p. 107), lo que provocará a largo plazo una
autentica "revolución lectora" (p. 114 y ss) que
influirá en todos los órdenes de la vida.


Es interesante la investigación de Van Horn acerca de la temática de los libros que más se
difunden en el XVIII: por una parte los libros religiosos, anónimos o no, con
licencia eclesiástica o saltándosela, pero siempre de temática religiosa, hasta
constituir el 98%, muchos de los cuales incluían ataques directos a la Iglesia Católica,
sobre todo en Inglaterra, más soterrados
en Francia y totalmente excesivos en Alemania (p. 116). Por otra parte irían
creciendo exponencialmente las novelas.


Asimismo Van Horn muestra cómo
a finales del XVIII comenzaron a desarrollarse las Bibliotecas de préstamo y
los salones de lectura. Recordemos que en el XIX, al aumentar las tiradas, los
libros se abarataron y se popularizaron, sobre todo las novelas (p.139).


También comenzaron a darse lo que hoy se denomina los
lectores de solapas, o personas que sólo leían la introducción y el último capítulo
de la novela, con lo que hacían creer a los demás que conocían la obra de la
que hablaban (p. 142).


Finalmente Van Horn se referirá
a la Enciclopedia
(p.162), al desarrollo del teatro (p. 201),
a las Exposiciones (p.244) y,
finalmente, a la masonería (p.309).


 


 


José Carlos Martín de la Hoz


 


J. VAN HORN MELTON, La aparición
del público durante la Ilustración europea
, ed. Universitat
de València, Valencia 2011, 346 pp.