La propuesta de Pascal

 

Como es bien sabido Blaise Pascal pasó los últimos años de su vida recoleccionando textos, a modo de fichas, para poder redactar a la postre un manual de apologética cristiana para que los hombres y mujeres de su tiempo pudieran, con la gracia de Dios, convertirse y recorrer el camino de la intimidad con Jesucristo para llegar resueltamente a la salvación eterna.

Recordemos una de las frases más importantes contenidas en sus célebres “pensamientos”, y es aquello de “el corazón tiene razones que la razón no entiende”, que bien puede servirnos para caracterizar el último trabajo en castellano del gran autor francés del siglo XVII.

Efectivamente, ha habido muchos autores que han intentado reconstruir esa apología y el último, parece ser, es Pierre Manent (Toulouse 1949) profesor de filosofía política en la Escuela de Estudios Superiores en Ciencias Sociales de París y miembro de la Academia Pontificia de Ciencias Sociales.

En primer lugar, abordará un estudio de las Cartas al Provincial con el fin de perfilar la crítica de Pascal a la Compañía de Jesús desde el orden de los métodos de actuación de la Compañía del tiempo de Pascal. Indudablemente como los datos que aporta de la actuación de los jesuitas provienen del propio Pascal no podemos confirmar si tiene razón la crítica del francés.

Lógicamente, estando en la ilustración francesa del XVII y su durísima percepción de desconfianza hacia la Iglesia católica suele manifestarse a la Compañía como el adalid del centralismo vaticano. De ahí que el juicio de Pascal acerca de que la Compañía sería la mediación de la mediación parece coherente con las críticas habituales de la época que historiamos.

En cualquier caso, no parece acertado defender a la Iglesia atacando a la Compañía de Jesús (33) sino que mejor hubiera sido atacar la mediocridad, falta de formación y la falta de coherencia de fe y de vida de la nobleza y de las capas altas de la sociedad católica francesa (50).

Enseguida se centrará en las pruebas de la existencia de Dios del propio Pascal, con prolijas argumentaciones sobre la apuesta de Pascal por la intervención de Jesucristo en la historia mediante la revelación de su persona y su mensaje. El aval de su argumentación radica ciertamente en la propia aparición de Jesús a nuestro protagonista y que llevó toda su vida cosida en su chaqueta: “la apuesta por el anhelo de lo infinito” (85). La clave está en dirigirse al corazón (109).

Finalmente vendrán las comparaciones apasionantes con san Anselmo de Canterbury (100) y con Hobbes (161). En ambos casos quedará claro que Pascal está en otro plano muy superior.

José Carlos Martín de la Hoz

Pierre Manent, Pascal y la propuesta cristiana, Rialp, Madrid 2025, 392 pp.