Hace un par de semanas, uno de mis hermanos me regaló un ejemplar del libro de Frances Viadiu Entre el torb i la Gestapo (“Entre la ventisca y la Gestapo”, podría traducirse el título) y me aconsejó que lo leyera. Lo hice a los pocos días, porque al ojear las solapas me di cuenta enseguida de que el tema me interesaba; no me ha defraudado. El autor nace en 1900, ocupa algunos cargos en la Generalitat primero y en el Gobierno Central después, en Solsona, su ciudad natal, y en Lérida, durante la Segunda República y la guerra civil española. Al terminar esta, se va a Francia. Alentado por un singular espía británico, durante la Segunda Guerra Mundial se establece en Andorra y organiza una red para la evasión de quienes intentan huir de la Francia ocupada por los nazis, se trata sobre todo de pasar a miembros de la resistencia que son perseguidos por la Gestapo y a soldados aliados, atrapados durante alguna misión en la zona de dominio alemán, que intentan regresar a sus unidades para seguir combatiendo. Esto es lo que cuenta en este libro escrito en 1950 y reeditado en el año 2000. En 1952 el autor regresa a España y pasa un año en la cárcel. Fallece en 1992.

Francesc Viadiu no figurará probablemente en ninguna historia de la literatura en lengua catalana, sin embargo, solo por la calidad de este libro lo merecería. Una historia real fascinante, con una intriga muy bien estructurada, que refleja con gran precisión las tensiones, incertidumbres y peligros de la clandestinidad. A esto hay que añadir las descripciones de los parajes franceses y andorranos en que se desarrollan los hechos narrados, de una riqueza y calidad sobresalientes. La personificación que el autor hace de la ventisca en los picos y puertos pirenaicos es de lo mejor que he leído últimamente. Sin pretensiones literarias Viadiu nos ha dejado una joya literaria. No sé si se traducirá algún día del catalán al castellano, valdría la pena. El bilingüismo tiene sus ventajas, nos enriquece, si se enseña bien.

Algo parecido podría decirse de las obras del recuperado Manuel Chaves Nogales o de Verde agua, de Marisa Madieri –esposa de Claudio Magris, ya fallecida–, que va por la octava edición (Minúscula): se trata de otros ejemplos de libros de gran calidad literaria, aunque escritos seguramente sin pretensiones literarias.

 

Luis Ramoneda