Presencia y futuro de Europa

 

El texto preparado por el entonces cardenal Joseph Ratzinger (1927), posteriormente Benedicto XVI, que ahora presentamos es el resultado de la suma de una serie de artículos científicos, comunicaciones a Congresos e intervenciones en conferencias públicas pronunciadas por el entonces Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la fe y relativos a la situación de la Iglesia y a la civilización europea y sus propuestas para el siglo XXI.

Evidentemente, la civilización occidental ha llegado a su fin tal y como la conocíamos y la hemos visto girar desde una sociedad liberal que imperaba en el siglo XIX, a una socialdemócrata que concluyó en el estado del bienestar y, por tanto, a una nueva cultura y una civilización globalizada, que será cristiana si los que tenemos fe aportamos nuestros valores siempre vigorosos y verdaderos para construirla con nuestros conciudadanos.

Las ideas del cardenal Ratzinger vertidas en este trabajo fueron ya publicadas inicialmente en la editorial Rialp en el año 2005 y, después de agotarse aquella edición, ha sido felizmente reeditada, pues indudablemente son textos de una gran importancia y dotados todavía de plena actualidad.

Resulta de un gran interés las páginas dedicadas por Ratzinger a explicar la reconstrucción de Europa después de la Segunda Guerra Mundial: tarea en la que indudablemente la religión católica tuvo mucho que aportar, entre otras cosas, devolver la esperanza, aprender a convivir, a perdonar, a olvidar y, por tanto, a confiar, poniendo en conjunción los diversos credos e ideologías (41, 43).

Es muy interesante que tanto el pensamiento fruto del cristianismo como los planteamientos derivados de la ilustración, tuvieron que conjuntarse, pues había que reconstruir el tejido educativo, industrial, sanitario, económico y social y no había tiempo para discutir (46).

Evidentemente la segunda ilustración que recorrió Europa en la segunda mitad del siglo XX, estaba abierta a la trascendencia y quizás era más realista que utópica, como muestra la revolución del 68 que contenía dentro de sí los propios límites de la dignidad de la persona humana: como recordará el Vaticano II: “Dios es la garantía de la dignidad de la persona humana” (50).

En la parte final volverá sobre Francisco de Vitoria y la dignidad de la persona humana, el derecho de gentes (85) y sobre la ley natural que para la escuela de Salamancas como para el Vaticano II son claves para la verdadera libertad de los hombres y el progreso humano (73, 76).

Después de recordar su diálogo con Habermas en busca de una ética común sobre la construir la civilización del tercer milenio, volverá a recordar la importancia de abrir las culturas a la trascendencia (97) y a Dios, pues sin eso está cerrado todo horizonte de verdadero progreso (132).

José Carlos Martín de la Hoz

Joseph Ratzinger, Presente y futuro de Europa, ediciones Rialp, Madrid 2021, 133 pp.

 

 

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