San Juan Crisóstomo

 

La historia del pontificado de Benedicto XVI se ha resumido en estos días de su fallecimiento, como el de la “profunda humildad”, pues todos hemos apreciado la extraordinaria riqueza de la teología del servicio que había llevado a cabo el pontífice al aplicar los textos conciliares a los tiempos y a la cultura del siglo XXI silenciosamente trabajando al servicio de la Iglesia y orando incesantemente por el Romano Pontífice Francisco.

Es muy importante, para poder entender ese largo proceso de discernimiento y de sus ricos frutos, volver a releer el imprescindible estudio “Introducción al cristianismo” del cardenal Ratzinger,  una obra rompedora en su momento y, por su puesto también,  en los tiempos actuales, puesto que ejemplificaba la sustancia teológica del Concilio Vaticano II; su cristocentrismo, el concepto de Iglesia de comunión, la coherencia de fe y vida, el inaplazable dialogo fe y razón, el espíritu de la liturgia, la profundidad y sentido de la Escritura, etc.

Dentro del aparato teológico del profesor Ratzinger y de su sólido armazón, está su profundo conocimiento de los santos padres y especialmente de san Juan Crisóstomo, pues basta con observar las notas a pie de página de sus obras, artículos y conferencias, para comprobar que es uno de los Padres de la Iglesia Oriental más ampliamente citado, estudiado y venerado por el teólogo del que nos estamos ocupando.

Indudablemente, la presencia de los Padres en Benedicto XVI se atribuye al valor que tienen los Lugares teológicos en la mente del cardenal Ratzinger y en sus convicciones teológicas acerca de la estrecha unión entre la Tradición oral (los Padres de la Iglesia, la Tradición escrita (la Sagrada Escritura) ambas entregadas al magisterio de la Iglesia y entregada de mano en mano hasta nuestros días.

Lógicamente, el propio Ratzinger había alentado en su momento como Prefecto del Dicasterio de la Doctrina de la fe estas obras completas de los Padres de la Iglesia y autores teológicos de la antigüedad que lleva años editando y preparando la editorial Ciudad Nueva, junto con otras editoriales y proyectos encomiables para dar a conocer los Padres de la Iglesia a los expertos en historia antigua, eclesiología, y exégetas del antiguo y del nuevo testamento.

Queremos, finalmente, referirnos al último volumen de la colección, Biblioteca de Patrística, sobre las homilías sobre la carta a sobre la carta a los filipenses, numerada con el número 123 en la serie en lengua castellana de Ciudad Nueva, que en esta ocasión ha preparado el profesor de Patrología emérito, de la Facultad de teología de Navarra, el doctor Marcelo Merino. Este trabajos parece un homenaje póstumo al papa emérito, que como todos los anteriores habría hecho las delicias del ya difunto Benedicto XVI.

José Carlos Martín de la Hoz

San Juan Crisóstomo, Homilías sobre la carta a los filipenses, ediciones Ciudad Nueva, Madrid 2022, 316 pp.