Un camino entretenido hacia Dios

 

El filósofo de la ciencia y catedrático de la Universidad de Sevilla, profesor Juan Arana, ha tenido la grandeza de espíritu de abrir de par en par su historia personal, a todos sus amigos, conocidos y, en general, a los lectores que se detengan a leer la obra que acaba de publicar, pues en cierto modo ha dejado al descubierto, su alma, puesto que ha escrito acerca de su camino personal hacía la fe.

Efectivamente, en este libro publicado por la BAC y prologado por uno de los grandes teólogos españoles del siglo XX, Olegario González de Cardedal, se describe de un modo entre divertido y enjundioso, lo grandioso y lo ordinario de un itinerario espiritual, a lo largo de toda una vida, hacia Dios y hacia la intimidad con Dios, que no es lo mismo, según deja claro nuestro autor.

Los nombres de quienes le han ayudado y acompañado más íntimamente a lo largo de tan larga trayectoria, terminan por desvelarse, aunque solo sea por el modo de dar las gracias aunque permanezcan veladas algunas facetas y, sobre todo, las luces de esa conversión; es lógico que sea así, pues podría robar, ni siquiera, mínimamente el protagonismo al propio Dios y, por supuesto, al autor, filósofo y protagonista que con su libertad a prueba de bomba ha buscado la verdad y ha ido respondiendo positivamente a las sucesivas propuestas divinas desde la época de Navarra hasta Sevilla.

En su conjunto el libro termina por convertirse en un modo nuevo y desenfadado, aunque sin perder rigor, de plantear la apologética cristiana, lo que ahora denominan tratados de teología fundamental, para convertirse en testimonio directo, pensado, rezado y observado por un hombre avezado en la búsqueda de la verdad.

A su vez, las anécdotas que se narran en el libro, son las suficientes para conocer al personaje y gozar viéndole razonar filosóficamente, por lo que estamos ante unas sencillas y breves pinceladas a lo largo de una vida, de su pues relación personal con Dios, algo que es inexpresable y por la que pasan muchas cosas muy difíciles de transmitir en un papel, pero urgentes de comunicar a los hombres, como es el hallazgo de la perla preciosa, del tesoro escondido, de la felicidad eterna y terrena.

Precisamente, terminamos de leer este interesante estudio del camino hacia la fe, en estos días en los que nos estamos preparando para recordar la fecha en la que san Josemaría Escrivá de Balaguer (1902-1975), fue solemnemente canonizado por san Juan Pablo II. en una solemne ceremonia en la Plaza de San Pedro, trasmitida por los medios de comunicación al mundo entero el 6 de octubre del 2002, después de un riguroso y largo proceso de canonización y ante miles de fieles, llegados del mundo entero.

La lectura del trayecto hacía Dios de un catedrático de filosofía es una manera muy plástica de expresar cómo serán miles de hombres y de mujeres de toda clase y condición los que podrán rejuvenecer su fe cristiana, tomarse en serio la santificación del mundo desde dentro, o sencillamente interesarse con curiosidad por la alegría de un cristiano corriente que muestra la felicidad  que proporcionada la amistad con Dios y el vivir para los demás.

José Carlos Martín de la Hoz

Juan Arana, Teología para incrédulos, BAC, Madrid 20290, 188 pp.