Una mujer en Jerusalén

"Trece libros a cuestas, los cuales han sido traducidos

a más de 20 idiomas. En castellano se ha publicado, entre otros títulos,  Viaje

al fin del milenio
 (Siruela), El

señor Mani
 (Anaya y Mario
class=SpellE>Muchnik
), Divorcio tardío  (Alfaguara) y La

novia liberada 
(Anagrama).

Nuestro entrevistado nació en Jerusalén en 1936. Estudió Literatura Hebrea

y Filosofía en la Universidad Hebrea. Prosista, dramaturgo y ensayista, fue

docente en el Departamento de Literatura Comparada de la Universidad de Haifa.

Sus trece libros, entre ellos siete novelas, han sido traducidos a más de 22

idiomas y ha sido premiado con el Booker
class=SpellE>Prize
, el Premio Israel de Literatura, el premio
class=SpellE>Bialik, el Grinzane
class=SpellE>Cavour, el Giuseppe Tomasi di
class=SpellE>Lampedusa, el Napoli y el
class=SpellE>Koret Jewish Book, entre otros.
style='mso-endnote-id:edn1' href="#_edn1" name="_ednref1" title="">
class=MsoEndnoteReference>
class=MsoEndnoteReference>[i]
"

Una mujer en Jerusalén, publicada en 2004, llega a España en 2008. En sus

casi 300 páginas, quizás, el suceso que sustenta el relato no tenga otra

importancia que la de permitir al escritor construir el discurso de sus ideas

sobre el amor, sobre Jerusalén –tierra prometida, sobre la moral del ser humano

y sobre el cuarto poder –los medios de comunicación, aunque el relato se centra

sobre la prensa escrita. Obviamente en el trasfondo se deja ver el problema

palestino y la convivencia imposible entre judíos y palestinos en Jerusalén.

La primera cuestión que nos propone a los lectores es quién es el verdadero

culpable de la tiranía a la que nos somete la prensa escrita. En el relato, el

propio protagonista, el director de recursos humanos, descubre que el periódico

que acucia a la empresa donde trabajaba la mujer asesinada en un atentado

terrorista, utiliza el papel que fabrica la propia empresa. Son los propios

sujetos acosados los que suministran a la prensa los útiles necesarios para tal

hostigamiento y además se someten a su tiranía, por atender a la propia honra y

fama.

El propio relato se plantea como una alternancia de la técnica narrativa

propia de la novela y el periodismo. Cada capítulo comienza con un párrafo en

cursiva que recoge las opiniones de los testigos de cada una de las actuaciones

del protagonista al modo periodístico.

En cuanto a las influencias el propio
class=SpellE>Yehoshúa
señala: "Obviamente a García Márquez, el cual

escribe cosas admirables, en su estilo del realismo fantástico. De sus libros

me seduce especialmente 
style='color:black'>El amor en los tiempos del cólera. Conozco a Borges, el

cual nos entrega esas realidades deslumbrantes, que han hecho escuela en la

literatura latinoamericana. Lo que me es difícil, a veces, en esa literatura,

es la falta de una moral, una ética. Por lo tanto es difícil decir que haya

sido atraído especialmente por ella, pero hubo libros que me otorgaron gran

placer leerlos."
title="">
style='font-size:10.0pt;font-family:"Trebuchet MS","sans-serif";mso-fareast-font-family:

"Times New Roman";mso-bidi-font-family:"Times New Roman";color:black;

mso-ansi-language:ES;mso-fareast-language:ES;mso-bidi-language:AR-SA'>[ii]

Quizás el lector sufra un desengaño al finalizar la lectura de esta novela

al comprobar que no sucede otra cosa que lo previsible: el viaje del

protagonista acompañando al cuerpo de la mujer asesinada. Ese viaje se antoja

como peregrinaje y catarsis del protagonista.

"La orden rotunda de reanudar el viaje la dio el director de recursos

humanos, que salió de las profundidades de la tierra pálido y muy débil,

después de (…) convencerse de que no quedaba resto alguno de esos dos sueños

que tanto lo habían trastornado y que nada ya lo retenía allí, se sintió lo

bastante fuerte para proseguir el viaje."pág. 269

No alcanzará a dar una solución a ese viaje hasta que consiga entregarse,

comprometerse con la causa. Repetidamente se le recrimina su actitud de

"caracol que se encierra en su concha en cuanto le tocan", su falta de

compromiso para dar la vida por la cruz o por la patria.
style='mso-special-character:footnote'>
class=MsoEndnoteReference>[iii]

Un viaje físico por las estepas y las montañas de un país desconocido pero

habitado por gentes de rasgos nórdicos y tártaros que rezan y "muestran su

respeto, que se quitan el sombreo y se santiguan con veneración, como si en

aquel ataúd fuese una verdadera santa."
href="#_edn4" name="_ednref4" title="">
style='mso-special-character:footnote'>
class=MsoEndnoteReference>[iv]

Y también un itinerario por el mundo onírico: "Somos las criaturas del sueño, comprimidas y disfrazadas, que tratamos

de penetrar en la dura cáscara del alma
".
href="#_edn5" name="_ednref5" title="">
style='mso-special-character:footnote'>
class=MsoEndnoteReference>[v]

Esta referencia a lo surrealista en el devenir de la novela es lo que le

vincula con los movimientos de vanguardia: "Referente a la literatura de

vanguardia, ésta rompió con modelos aceptados, en especial con el realista.

Pero frente a este tipo de literatura se hacía indispensable la ruptura. Fue

sumamente importante para mi generación y para poder liberarnos de la

generación anterior, que fue una generación muy ideológica, y para realizar tal

liberación fue indispensable cambiar los temas literarios. Uno de los cuales,

casi míticos, fue el de la Guerra de Liberación, misma que hizo posible la

construcción del país. Un grupo de escritores, entre los que me encontraba

junto a Amos Oz, tuvimos que construir una personalidad diferente a esa

concepción realista. La primera acción realizada fue la acción surrealista."
style='mso-endnote-id:edn6' href="#_edn6" name="_ednref6" title="">
class=MsoEndnoteReference>
class=MsoEndnoteReference>[vi]

La moralidad del acto humano del amor subyace en los sueños del

protagonista. Parte del amor sensual "su cuello largo y fuerte –alusión al arte

de Modigliani-, tremendamente sensual…"
style='mso-endnote-id:edn7' href="#_edn7" name="_ednref7" title="">
class=MsoEndnoteReference>
class=MsoEndnoteReference>[vii]
se superpone a su

freudiano complejo de Edipo: "aquella vez no solo anotó su curriculum

–el de la empleada asesinada- sino también la historia de su amor por él,

muchos años atrás, cuando era un niño o incluso un bebé y ella le daba de mamar

mientras hacían el amor."
name="_ednref8" title="">
style='mso-special-character:footnote'>
class=MsoEndnoteReference>[viii]

Del amor sensual, el hombre, el director de recursos humanos, cualquier

hombre, tiene que ascender, llegar al alma del ser amado: itinerario de

catarsis.

"El amor –dice el periodista citando a Platón- es una señal de nuestra

finitud y de la posibilidad de superarla. La pasión humana es como una escala

con varios peldaños y va desde lo más concreto a lo más abstracto, de lo

material a lo espiritual… Y de este modo, buscando a través de la belleza de

oros cuerpos, trasciende lo corporal y accede a la belleza del alma."
style='mso-endnote-id:edn9' href="#_edn9" name="_ednref9" title="">
class=MsoEndnoteReference>
class=MsoEndnoteReference>[ix]

Así pues, del sueño de Eros –un demonio cruel y sucio- y del sueño de una

religión vivida para dar gusto a sus padres, es de lo que tendrá que

purificarse el protagonista, el israelí: "El sol del mediodía derrite el azul

del cielo y los alumnos del instituto con la cabeza engalanada de flores corren

hacia sus padres, con el fin de enseñarles los pequeños rollos de la Torá que

han preparado y decorado con ocasión de la fiesta de Shavuot,

a finales de la primavera."
name="_ednref10" title="">
style='mso-special-character:footnote'>
class=MsoEndnoteReference>[x]

Abraham B. Yehoshúa admite en la citada

entrevista que "la gran influencia se encuentra en Faulkner, que asimismo

influyó, no se puede dejar de nombrar, de forma importante en la literatura

latinoamericana. Faulkner se descubre ante mis ojos como el escritor más

importante del siglo XX y su importancia insuperable se expresa en la

combinación magnífica de una estructura épica que retrocede generaciones atrás

y el enfrentamiento con diferentes mitos; y es muy adecuado para nosotros, los

judíos, que vivimos y nos confrontamos con mitos; y también en sus últimas

obras, las cuales en su estructura de estilo y en sus formas literarias se

vuelca con totalidad en sus monólogos, los cuales me han influido."

style='font-size:10.0pt;font-family:"Trebuchet MS","sans-serif";mso-fareast-font-family:

"Times New Roman";mso-fareast-language:ES'> 


style='font-size:10.0pt;font-family:"Trebuchet MS","sans-serif";mso-fareast-font-family:

"Times New Roman";color:black;mso-fareast-language:ES'>Faulkner construye un

relato con el traslado del ataúd de la protagonista hasta el pueblo que la vio

nacer y que no es otra cosa que la ocasión que el lector tendrá de asistir a

las miserias encerradas en los corazones de los familiares de la difunta; las

miserias y la grandeza de aquellos que consiguen superar sus egoísmos y con su

entrega se purifican. En "Mientras agonizo", la protagonista hace prometer a su

marido y a sus hijos que trasladarán su ataúd hasta su pueblo pero esa promesa
style='mso-spacerun:yes'> persigue la liberación de su hija. En "Una

mujer en Jerusalén", es la madre la que arranca la liberación propia y la del

hijo, su nieto, exigiendo que su hija sea enterrada en Jerusalén.

No conocemos la conclusión del enterramiento porque ya no es necesaria.

Jerusalén, patria de libertad, es la idea que el autor quiere transmitir al

lector. A pesar de todos los problemas, incluso para los no judíos, Jerusalén

es la ciudad eterna.

 


style='font-size:10.0pt;font-family:"Trebuchet MS","sans-serif";mso-fareast-font-family:

"Times New Roman";color:black;mso-fareast-language:ES'>Abraham B.
class=SpellE>Yehoshúa (2008)
href="http://www.clubdellector.com/fichalibro.php?idlibro=7372">Una mujer en

Jerusalén, Barcelona, Anagrama. Traducción del hebreo de Sonia de Pedro


style='font-size:10.0pt;font-family:"Trebuchet MS","sans-serif";mso-fareast-font-family:

"Times New Roman";color:black;mso-fareast-language:ES'>

 

 





name="_edn1" title="">
style='font-size:10.0pt;font-family:"Calibri","sans-serif";mso-fareast-font-family:

Calibri;mso-bidi-font-family:"Times New Roman";mso-ansi-language:ES;mso-fareast-language:

EN-US;mso-bidi-language:AR-SA'>[i]

href="http://www.revista.agulha.nom.br/ag59yehoshua.htm">http://www.revista.agulha.nom.br/ag59yehoshua.htm

Entrevista de Eduardo Mosches, Agulha,

Revista de cultura nº 59, Fortaleza- Sao Paulo, 2007


name="_edn2" title="">
style='font-size:10.0pt;font-family:"Calibri","sans-serif";mso-fareast-font-family:

Calibri;mso-bidi-font-family:"Times New Roman";mso-ansi-language:ES;mso-fareast-language:

EN-US;mso-bidi-language:AR-SA'>[ii]

class=SpellE>Idem.


name="_edn3" title="">
style='font-size:10.0pt;font-family:"Calibri","sans-serif";mso-fareast-font-family:

Calibri;mso-bidi-font-family:"Times New Roman";mso-ansi-language:ES;mso-fareast-language:

EN-US;mso-bidi-language:AR-SA'>[iii]


"¿Acaso hay en el mundo una cruz por la que merezca la pena suicidarse?" Una

mujer en Jerusalén, Anagrama, Barcelona, 2008, pág. 244

"… y, a pesar de ese don para el mano, también infundía

en ellos –los soldados- la sensación de que no hay ninguna causa en el mundo

por la que perder la vida en el campo de batalla." Una mujer en Jerusalén,

Anagrama, Barcelona, 2008, pág. 246-247


name="_edn4" title="">
style='font-size:10.0pt;font-family:"Calibri","sans-serif";mso-fareast-font-family:

Calibri;mso-bidi-font-family:"Times New Roman";mso-ansi-language:ES;mso-fareast-language:

EN-US;mso-bidi-language:AR-SA'>[iv]


Una mujer en Jerusalén, Anagrama, Barcelona, 2008, pág. 271


name="_edn5" title="">
style='font-size:10.0pt;font-family:"Calibri","sans-serif";mso-fareast-font-family:

Calibri;mso-bidi-font-family:"Times New Roman";mso-ansi-language:ES;mso-fareast-language:

EN-US;mso-bidi-language:AR-SA'>[v]


Una mujer en Jerusalén, Anagrama, Barcelona, 2008, pág. 239


name="_edn6" title="">
style='font-size:10.0pt;font-family:"Calibri","sans-serif";mso-fareast-font-family:

Calibri;mso-bidi-font-family:"Times New Roman";mso-ansi-language:ES;mso-fareast-language:

EN-US;mso-bidi-language:AR-SA'>[vi]

href="http://www.revista.agulha.nom.br/ag59yehoshua.htm">http://www.revista.agulha.nom.br/ag59yehoshua.htm

Entrevista de Eduardo Mosches, Agulha,

Revista de cultura nº 59, Fortaleza- Sao Paulo, 2007


name="_edn7" title="">
style='font-size:10.0pt;font-family:"Calibri","sans-serif";mso-fareast-font-family:

Calibri;mso-bidi-font-family:"Times New Roman";mso-ansi-language:ES;mso-fareast-language:

EN-US;mso-bidi-language:AR-SA'>[vii]


Una mujer en Jerusalén, Anagrama, Barcelona, 2008, pág. 243


name="_edn8" title="">
style='font-size:10.0pt;font-family:"Calibri","sans-serif";mso-fareast-font-family:

Calibri;mso-bidi-font-family:"Times New Roman";mso-ansi-language:ES;mso-fareast-language:

EN-US;mso-bidi-language:AR-SA'>[viii]


Una mujer en Jerusalén, Anagrama, Barcelona, 2008, pág. 243


name="_edn9" title="">
style='font-size:10.0pt;font-family:"Calibri","sans-serif";mso-fareast-font-family:

Calibri;mso-bidi-font-family:"Times New Roman";mso-ansi-language:ES;mso-fareast-language:

EN-US;mso-bidi-language:AR-SA'>[ix]


Una mujer en Jerusalén, Anagrama, Barcelona, 2008, pág. 230


name="_edn10" title="">
style='font-size:10.0pt;font-family:"Calibri","sans-serif";mso-fareast-font-family:

Calibri;mso-bidi-font-family:"Times New Roman";mso-ansi-language:ES;mso-fareast-language:

EN-US;mso-bidi-language:AR-SA'>[x]


Una mujer en Jerusalén, Anagrama, Barcelona, 2008, pág. 242

 

 

El suceso que sustenta el relato permite al escritor construir el discurso

de sus ideas sobre el amor, sobre Jerusalén –tierra prometida-, sobre la moral

del ser humano y sobre el cuarto poder –los medios de comunicación-. De fondo, la

convivencia imposible entre judíos y palestinos.