Mejor que no me lo expliques

En estos seis cuentos, de los cuales tres son autobiográficos, según dijo, la escritora refleja "una visión de la adversidad y de esos recursos internos que poseen los seres humanos, y de los que no son conscientes, para enfrentarse a las situaciones dolorosas".

Autora de 'Nunca se sabe', novela por la que mereció también el XXI Premio Tigre Juan en 1997, Monsó acerca en su última obra, concretamente en el cuento 'Los ignorantes', del que dice que es su trabajo más biográfico, su infancia, mientras en el relato que da nombre al libro y en 'La contraseña' deja traslucir sus vivencias, salpicadas de "la extrapolación que la ficción permite".

Considerada como una de las voces más sugerentes de la narrativa catalana de los últimos años, Monsó se adentra en esta obra, editada por Alfaguara, en aspectos esenciales de la vida, como la incomunicación entre la pareja, la familia, los amigos y el posible enfoque ante la vida desde la enfermedad, y realiza una radiografía de las miserias y alegrías de la existencia.

Y lo hace desde la escritura porque, para Monsó, la literatura es uno de esos recursos que "permite analizar el problema y situarlo en su justa medida", además, explica, es "la única herramienta que permite acceder a la mente del individuo", por ello, asegura la autora catalana, la mejor forma de conocer a alguien es a través del intercambio de libros.

"La esencia del ser humano es la comunicación. La palabra está mediatizada por el auditorio, el interlocutor, los gestos, la imagen y la interacción, mientras que cuando escribes fluye una voz interior que reflejas en el papel y es lo más parecido al discurso en estado puro", sostiene la escritora, que se encuentra en Madrid para presentar su obra.

En estos cuentos, Monsó se plantea si es tan necesario, como se afirma en ocasiones, que "las parejas hablen continuamente", o por el contrario es "preferible aligerar las relaciones", y en este sentido, se decanta por la segunda opción. "Me gustan las relaciones en las que existe una buena comunicación, dentro de las posibles", matizó.

Diferencias entre hombres y mujeres

Porque, Monsó es consciente de las diferencias entre hombres y mujeres, aspectos que ha mostrado en sus personajes literarios, caracterizados por protagonistas femeninas con grandes capacidades lingüísticas frente a los varones que, para ella, son "poco habladores y lo que hacen es dominar el espacio", rasgos tan diferenciados que, a su juicio, motiva conflictos en las parejas.

En estos relatos la autora de 'Todo un carácter' no sólo se adentra en las múltiples formas de hablar sino también en los vacíos, la ausencia y los silencios, problemas que asocia en gran medida a la sociedad actual y evolucionada, y que no es extrapolable a otras sociedades "los inmigrantes ven de forma extraña como nos relacionamos, por ejemplo, con la familia", explica Monsó, quien cree que este es el "peaje que ha de pagar la Vieja Europa".

Otra característica de la obra de Monsó es el humor con el que se enfrenta a los temas trascendentales, como la enfermedad, que aborda en dos de sus cuentos, un rasgo que según la autora surge "de forma espontánea cuando un problema hunde a alguien": "Te permite tomar distancia de nosotros mismos y de la tragedias personales".