El término «gracia» raramente aparece en los evangelios; es un eco de Pablo, cuyas cartas están llenas de referencias al favor, el don o la benevolencia de Dios. Él utiliza una gran variedad de palabras griegas, incluida charis, un término corriente que adquirió un tenor particular en la teología cristiana, pasando a designar un don entregado a quien no lo merece.
El concepto de gracia