Sangre española

Típica novela negra americana con humor irónico. Incluso las escenas más escabrosas son descritas con gran elegancia. Duros de película en Nueva York y San Francisco. El volumen contiene tres relatos, publicados entre 1934 y 1936, del último de los cuales toma su título el libro.

Ediciones

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1980 Bruguera
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Pasar de las novelas extensas de Chandler, por ejemplo las novelas del detective Marlowe, a los relatos cortos del mismo autor, supone un recorte importante de calidad. En aquellas la figura del detective está perfectamente dibujada y se reproduce un ambiente. En los relatos cortos personajes sin dibujar desarrollan una pequeña trama. Siguen siempre el mismo esquema general y el único criterio al que se ajusta Chandler es el de no descubrir al asesino hasta el final. Sin pretensiones de calidad se limitan a ser entretenidos. Los relatos utilizan dos problemas fundamentales: la corrupción política y policial y el consumo de drogas. Respecto a la corrupción, vemos cómo los Estados Unidos adelantaron en décadas a Europa en esta materia al mismo tiempo en que crecían en prosperidad. Sobre el tráfico y consumo de drogas, Chandler lo dibuja en aquella época (1934-1936) como un fenómeno marginal. Esto nos lleva a preguntarnos cómo las drogas han podido convertirse después en algo de consumo tan masivo. Por último hacer referencia al título del último relato: "Sangre española". El protagonista, apellidado Delaguerra, afirma de sí mismo que su sangre es española. Quizá por ello se deja guiar por el impulso quijotesco de no denunciar la implicación en un crimen de la mujer a la que había amado. Los primeros españoles que llegaron a los Estados Unidos lo hicieron procedentes de Cuba. Luego hubo algunas oleadas de emigración directa aunque fueran minoritarias. México, Argentina y Venezuela seguían siendo en aquellos años objetivo preferente para los españoles.