Jesús y los manuscritos del Mar Muerto

El descubrimiento en 1947 de los manuscritos del mar Muerto dio lugar a una serie de interrogantes que hasta ahora no habían encontrado una respuesta certera. ¿Cuál es el verdadero origen de Jesús? ¿Sería la publicación de esos documentos un golpe dirigido al corazón de las grandes religiones monoteístas? ¿O se trataba de una conspiración encaminada a ocultar la verdad al gran público? En Jesús y los documentos del Mar Muerto, el primer libro basado en la totalidad de esos documentos, César Vidal ofrece un profundo análisis de tales cuestiones y nos ayuda a comprender por qué el cristianismo se ha convertido en una religión universal. A través de un estudio comparativo en el que se describen y analizan las presuntas relaciones entre los hallazgos del mar Muerto y los datos del Nuevos Testamento.

Ediciones

Edición Editorial Páginas ISBN Observaciones
2006 Planeta
220
9788408065289
Valoración CDL
3
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2.333332
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Imagen de tajamata

Cesar Vidal es un apologeta de los tiempos modernos , y casi toda su obra se monta en la defensa de la Fe cristiana. Su indiscutible erudición,sumado a su buen hacer delante del ordenador hacer atractiva la obra,en la que se encarga de desmontar la supuesta falsificación del evangelio por parte de los cristianos a lo largo de los primeros siglos despues de Cristo. El autor va desgranando las diferencias entre el mensaje de Jesucristo y el del Maestro de justicia presente en los manuscritos del mar muerto,que tanta polémica levantaron en su dia y que con el paso del tiempo se han puesto en su lugar.
Atención al lector católico: Vidal es cristiano,pero protestante y se le nota:insistencia repetitiva en presentar a "los hermanos de Jesus", a Santiago,hermano de Jesus","solo la fe salva y no las obras",etc.

Imagen de acabrero

En la segunda mitad del siglo pasado se publicaron varios libros que acogían con sorpresa la publicación de los manuscritos del Mar Muerto, el hallazgo arqueológico más interesante de los últimos tiempos. Con un planteamiento sensacionalista y falto de rigor, algunos autores pretendieron que el “Maestro de Justicia” personaje central, fundador de la secta del Qumrán, era como un predecesor de Jesucristo. Es decir, pretendían que la vida y las enseñanzas de Jesús no eran más que una segunda vuelta de algo que ya había existido. César Vidal se ocupa, en este libro, de desmontar, con todo detalle, semejante relación, demostrando las diferencias que existen, muy grandes, entre ambos personajes. No sólo eso si no que aclara cómo los manuscritos encontrados en la orilla del Mar Muerto dejan en evidencia las correcciones que los judíos hicieron del Antiguo Testamento, por los años 90 después de Cristo, para quitar la razón a los cristianos sobre el carácter mesiánico de no pocos pasajes de sus libros. Esto puede explicar por qué los judíos hayan puesto tan poco interés en publicar esos magníficos descubrimientos.

En otros libros escritos por César Vidal se manifiesta más claramente su condición de protestante, cuando habla de asuntos referentes al cristianismo. En este libro sólo podríamos encontrar algunos pequeños detalles. Por ejemplo, hace hincapié en varios momentos en que Jesús rechaza el ayuno, y esto no es cierto. Cuando le preguntan los fariseos por qué sus discípulos no ayunan les dice que ayunarán cuando el novio no esté con ellos, en clara alusión a una vida cristiana posterior a su marcha. Y el mismo Cristo ayunó 40 días. Insiste mucho en que Jesucristo no mandó la pobreza a sus discípulos, que sólo habla de la pobreza de espíritu, pero olvida que dijo que difícilmente podrán los ricos alcanzar el Reino de los Cielos. No hace referencia al sacerdocio instituido por Cristo, quizá porque al hablar del sacerdocio se refiere al del Antiguo Testamento. Cuando habla de los hermanos de Jesús no entre en el tema y envía a otro libro suyo. Etcétera. Unos cuantos pequeños asuntos que dejan entrever sus planteamientos protestantes, pero una minucia, pienso yo, comparado con los abundantes argumentos de peso sobre los temas cruciales de Cristo como Mesías.

Puede despistar, al lector católico, algunos de los términos que utiliza: habla de Pacto Nuevo en lugar de Nueva Alianza; habla de llamado en lugar de vocación o llamada. En fin, pequeños detalles. Creo que el libro, en su conjunto, hará mucho bien a un público general, poco informado pero interesado en conocer más de Jesucristo.