Mamá y el mar

Mi madre es una haenyeo, una mujer del mar.
Todos los días, entra en el agua y aguanta la respiración para pescar.
Solo se lleva lo que el mar le permite y cuida de él como si fuera un jardín de flores, para que, cuando yo sea mayor, también pueda nadar entre las olas y convertirme en una mujer del mar.

Ediciones

Edición Editorial Páginas ISBN Observaciones
2019 Principal de los Libros
36
978-84-17333-71-3

Ilustraciones de Eva Armisén

Adaptación y traducción de Santi Balmes

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Álbum ilustrado sobre las haenyeo, las mujeres buceadoras del mar de Jeju en Corea del Sur. En 2016, la UNESCO las declaró Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la peculiaridad de su trabajo y su forma de buceo, a pulmón libre sin botellas de oxígeno. De este modo, las haenyeo recolectan del mar (como si se tratase de un campo de siembra) solamente lo necesario, es decir, lo que su respiración les permite, creando un equilibrio perfecto entre las cosechas del mar y las necesidades de las familias que viven de él: “Cuidamos del campo de mar como si fuera nuestro jardín de flores”.

El relato está narrado en primera persona por una niña, hija y nieta de mujeres del mar. Especialmente, su abuela es una de las mejores buceadoras de la isla y siempre trae la red llena de mariscos y peces del mar de Jeju. Sin embargo, su madre, cuando era joven, se hartó de esta vida y decidió irse a vivir a la ciudad donde trabajó en una peluquería; pero los recuerdos de los sonidos del mar, su aroma y su atracción la llevaron de vuelta a casa para convertirse en una gran haenyeo. La narración en primera persona permite a los pequeños lectores conocer los pensamientos y sentimientos de la niña que admira a estas mujeres, pero también comprende los peligros, los riesgos y los miedos que deben superar adaptándose en todo momento a las circunstancias de este tipo de buceo, porque “el mar no perdona la codicia humana”.

La escritora Heeyoung Ko y la ilustradora Eva Armisén se han unido para crear este precioso álbum y rendir un homenaje a las haenyeo, cuya vida las ha fascinado por la determinación que estas mujeres poseen y su capacidad de trabajo en grupo, ayudando a las demás en condiciones extremas. Con unos textos sencillos y entrañables unidos a las ilustraciones de colores alegres y brillantes, las autoras destacan las principales cualidades de las haenyeo en su peligroso trabajo, como son la aceptación de sus propias limitaciones físicas al bucear sin oxígeno,  el respeto por la naturaleza y la sencillez en su estilo de vida pescando exclusivamente el alimento necesario para mantener a sus familias y al pueblo al que pertenecen.