En 1941 Francia había sido ocupada por la Alemania nazi. Maritain, exiliado en los EE.UU., analiza los errores en los que ha incurrido la IIIª República francesa.
Desde una perspectiva cristiana repasa los conceptos de libertad, igualdad, autoridad, así como el llamado maquiavelismo político: separación entre ética y política.
También se plantea cuál debe ser la cooperación en la ciudad temporal entre católicos, creyentes no católicos y ateos. En ese momento las tres categorías estaban representadas, junto con los judíos, en los campos de concentración alemanes.