El 20 de mayo de 1521 Ignacio de Loyola fue herido en la batalla de Pamplona. Comenzó entonces la gran transformación espiritual o conversión que marcaría irremediablemente sus sueños, búsquedas, proyectos y camino de vida. Con ocasión del V centenario de este acontecimiento, el P. Arturo Sosa, General de la Compañía de Jesús, responde a las preguntas del periodista Darío Menor para reflexionar sobre los frutos que se esperan de este «Año Ignaciano».