Leer, incluso antes de ser editados, estos textos de mi hermano capuchino, el cardenal Seán OMalley, fue como hacer un viaje de reconocimiento a los diferentes momentos de la vida de la Iglesia. Las homilías del cardenal Malley, como las del papa Francisco en Santa Marta, son verdaderas «homilías», en el sentido original del término, esto es, son conversaciones, reflexiones sobre cosas y acontecimientos, no ideas sobre ideas.