En la pequeña aldea de Marán, enclavada en lo alto de las montañas en un rincón olvidado del Cáucaso, un lugar donde los sueños, las maldiciones y los milagros se toman muy en serio, una comunidad vive unida a pesar del paso del tiempo. En su vida cotidiana –cosechando, haciendo baklava, limpiando las casas–, los aldeanos se apoyan unos a otros en los buenos y en los malos momentos. Sin embargo, a veces basta una chispa para que la vida dé un vuelco y otras historias darán al pueblo algo nuevo de qué hablar...