Enero de 2024, 16:30

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Madrid

Diciembre, 2018

Duelo de alfiles

Valero, Vicente

Duelo de alfiles es un libro singular y absorbente desde la primera página. En él se muestra, en un original y casi detectivesco seguimiento por ciudades, islas, pueblos, cartas, diarios y libros, los pasos confluyentes de cinco grandes escritores: Nietzsche, Rilke, Kafka, Benjamin y Brecht.

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Imagen de José Ignacio Peláez Albendea

Obra de género híbrido, un mix de novela, ensayo sobre escritores, libro de viajes y novela sicológica. Trata de cinco grandes escritores: Nietzsche, Benjamin, Brecht, Kafka y Rilke; y de varios lugares: la isla danesa de Fiona, Turín, Múnich, Zürich y la aldea suiza de Berg am Irchel.

El telón de fondo es la Primera Guerra Mundial, el exilio, la gestación de algunas de las grandes obras de esos autores, los movimientos literarios y artísticos de la época, como el dadaísmo, que nació en el cabaret Voltaire de Zürich…

El hilo conductor es el narrador-protagonista, el yo literario del autor, y su afición por el ajedrez, compartida por varios de los escritores sobre los que escribe con un gran conocimiento de sus peripecias y de su obra.

El libro se lee con facilidad, porque la historia está muy bien contada, y con un estilo terso, sencillo y profundo a la vez.

La mirada de Valero sobre los cinco escritores es compasiva y resalta sus aciertos.

Echo en falta una mirada crítica sobre algunos de los autores que tuvieron muchos aciertos, pero también, desgraciadamente, con sus ideas sembraron semillas que más adelante produjeron muchos males.

Imagen de cattus

Vicente Valero, en El arte de la fuga, nos ofreció tres relatos sobre determinados momentos de la vida de San Juan de la Cruz, de Hölderlin y de Pessoa. En Duelo de Alfiles, hace algo parecido: el encuentro entre Walter Benjamin y Bertoldt Brecht en una ciudad danesa; la estancia de Nietzsche, durante unos meses, en Turín; la lectura de un relato por parte de Kafka en Munich; las huellas de Rilke en Suiza, donde terminó Elegías de Duino y falleció poco después. El autor combina muy bien la narración de los hechos del pasado con las peripecias de los viajes que realiza a los lugares donde sucedieron. Además, las cuatro historias tienen como hilo condcutro el ajedrez, al que Valero es buen aficionado, y que da pie a interesantes reflexiones y a curiosas historias, como la del matrimonio turinés que juega todas las mañanas varias partidas en uno de los cafés de la ciudad. Relato muy bien escrito y atractivo, por lo que se cuenta y por el modo de narrarlo. Leer artículo >>