Cometas en el cielo

Yo no he podido con él. Me molesta la crudeza...

Buena novela, en parte autobiográfica, pero no la califico como muy buena. ¿Por qué? Pues por excesivamente previsible. Esperaba un relato sobre Afganistán escrito por un afgano y me parece que el modo de escribir, el desarrollo, el desenlace es demasiado yankee. La historia del malo nazi que al principio triunfa con su brutalidad, pero al final es castigado duramente con la habilidad heredada por el hijo de su primera víctima ... me parece que ya he visto esa película, y mejor contada. De todas formas me parece que es un buen libro, sin duda oportunista, pero agradable de leer.

Es un libro maravilloso que me ha impactado mucho. Muy fácil de leer y con un gran contenido.
Me ha permitido acercarme a realidades antes desconocidas para mi, como es la vida en Afaganistan y las grandes diferencias sociales que existen en dicho lugar, ofreciéndote en el viaje una bonita historia de dos amigos residentes en Kabul, que te hace pensar sobre muchos aspectos (amistad, fe, traición, infancia, desesperación...).
Se conjuga a la perfección el placer de leerla con la tristeza que produce la propia historia que se desarrolla.

Me ha gustado especialmente la manera de escribir tan realista que hace que el lector pueda meterse con facilidad en la historia y sufrir y vivir junto al protagonista. Cuenta cómo transcurre la vida un chico afgano, en los años 70, así como, la realidad afgana desde la invasión de los talibanes.

En ella, también, se reflexiona sobre la sinceridad, la amistad y a otros valores relevantes, que no nombro por no estropear el final.

Me ha disgustado un poco la parte amorosa del relato, pues el protagonista se casa sin conocer apenas a la chica, costumbre afgana, que al no ser la propia, me ha chocado bastante. Pasa del flechazo al matrimonio. Y, además, tiene suerte de que la chica resulta ser un gran partido.

Por otra parte, poco a poco, se va planteando la existencia, de un Dios, en este caso Alá, al que acude cada vez que algo le asusta. Finalmente, acaba creyendo en Él, pues le salva en las ocasiones de grave peligro.

Es una historia triste pero tiene "buenas partes" que la rescatan de convertirse en tragedia.

Novela deliciosa y a la vez dura en sus planteamientos. LLama la atención de la
ontraposición de dos parejas: padre rico paquistaní y esclavo hazara y la otra la del hijo del señor y el hijo del hazara (sirvientes de clase baja, casi esclavos)
Es una novela llena de valores sobre todo la fidelidad y la amistad. El personaje de Baba (señor rico) a pesar de lo chante de su primera avctitud nos presenta una personalidad impresionante, capaz de sacrificarse por su hijo, mantener sus raíces y adaptarse a situaciones humillantes en su exilio en EE.UU. La figura del hijo es muy interesante; de la necesidad de afecto de su padre pasa a idolatrarlo. Es un ejemplo de cómo el hombre se enfrenta sus propios miedos y la capacidad de sacrificio para reencontrar lo perdido y "pagar2 su gran culpa.
Fantástica la narración bien hilada a través de la historia de Afganistán desde 1975 hasta la opresión de los talibanes. No es una novela histórica pero el lector aprende mucho de los avatares de este pís y de sus arraigadas costumbres y la estructura muy bien construida. Sus descripciones son magistrales.
Es una novela que engancha y aporta todo tipo de valores.

Sencillanente decir que se trata de una gran novela. Suscribo todo lo que pone de relieve acabrero en su reseña. Novela dura pero deliciosa.

Mi reseña no quiere añadir nada a las anteriores sino ratificarlas. Un libro magnífico. De los que dejan huella. Lo he recomendado muchísimo.

Es una novela que he recomendado mucho los últimos meses. Magnífica categorización de presonajes, psicológicamente muy inteligente y un repaso de la historia actual de Afganistán que estremece. Es verdad que trata situaciones curdas pero la guerra es brutal y eterminadas costumbres también. En ningún momento es soez ni morbosa. Una novela en la que el protagonsita reza, sufre y ama; todo con naturalidad y con un guión que evita el melodramatismo y la cursilería.

Durante toda la novela he creído que estaba leyendo la biografía del autor, sólo en algunos momentos de la historia me daba cuenta de que no podía ser su vida, el autor consigue meterte tanto en la historia que el protagonista parece el mismo autor. Escrita en primera persona, es una novela que te atrapa desde las primera líneas y no te suelta hata la última palabra. Es dura, porque la historia es dura, aunque en esos momentos más cruciales el autor, con elegancia y una enorme sensibilidad, que no sensiblería, sabe narar los hechos sin caer en lo desagradable. Yo he llorado, pero nada del libro me ha echado para atrás. El paisaje, los personajes llenos de humanidad, la lealtad de Hassan, la cobardía de Hamir, su arrepentimiento, la relación entre padre e hijo, la capacidad de perdonar, la barbarie de los talibanes, la tragedia del país, todo, paso a paso se te queda en el corazón. MARAVILLOSA.

Me habían dicho que era un libro magnífico, y lo es. Pero en mi opinión es de una crudeza extrema. Es horrible pensar que esas situaciones puedan darse hoy en día. Para algunas personas puede resultar un poco desagradable