Introducción a la vida de oración

Tratado sobre la oración en el que se unen consideraciones clásicas sobre el modo de hacer oración, con otras ideas siempre sugerentes y originales del autor.

Ediciones

Edición Editorial Páginas ISBN Observaciones
2002 Palabra
217
Valoración CDL
4
Valoración Socios
4
Average: 4 (4 votes)
Interpretación
  • No Recomendable
  • 1
  • En blanco
  • 2
  • Recomendable
  • 3
  • Muy Recomendable
  • 4

4 valoraciones

Género: 

Comentarios

Imagen de erf

Ensayo antológico sobre la oración y la meditación. De un modo práctico el autor pone en tus manos los instrumentos para poder estar en condiciones de poder orar y después "estar" en esa oración.Recoge lo clásico y añade la novedad de la la parte dedicada al recogimiento con sus cinco aspectos, necesarios para lograr el objetivo propuesto, suponen una ayuda para mantenerse de modo permanente en esa "actitud"..

Imagen de Germán

“El hombre necesita de la oración para permanecer sano espiritualmente. Pero la oración sólo puede brotar de una fe viva. Mas la fe –y con esto se cierra el círculo- únicamente puede ser viva si se ora. La oración no es una actividad que pueda ejercitarse o abandonarse sin que la fe sea por ello afectada. La oración es la expresión más elemental de la fe, el contacto personal con Dios, al que fundamentalmente está encaminada la fe. Es posible que la oración deje de fluir durante algún tiempo sin que la fe se atrofie, pero a la larga es imposible creer sin orar, así como no se puede vivir sin respirar.” (Guardini, Introducción a la vida de oración, p. 34).
Estas palabras del propio autor de la obra comentada orientan en buena medida sobre lo que es este extraordinario libro de Guardini sobre la oración.
Estamos realmente ante un verdadero, y breve, “tratado sobre la oración”, en el que se exponen, con profundidad, originalidad, claridad y sencillez notables, los temas centrales sobre esa dimensión del cristiano que lo pone en presencia de Dios, su Padre.
Estas páginas son fruto, por una parte, de una prolongada y fecunda reflexión del maestro ítalo-alemán sobre la oración, y, por otra, de una experiencia personal no menos larga y fecunda. Son páginas frescas, pensadas, vividas, que enseñan a hacer oración y animan a hacerlo con esperanza y constancia.
Los sucesivos apartados responden de modo convincente a las objeciones y preguntas que se le pueden ocurrir a quien se plantea la posibilidad de rezar con continuidad y con fruto espiritual: la preparación necesaria; el hombre ante el Dios Uno y Trino (muy bellos los epígrafes destinados a la oración a Jesucristo, al Padre, al Espíritu Santo); la oración vocal y la meditación; la Providencia y la oración; la oración a los santos y a María, la Madre de Dios, con brevísima y sustanciosa referencia al Rosario (¡lástima que todavía no se haya traducido al español el librito del autor sobre esta devoción mariana, tan de actualidad en este “año el Rosario”!); la oración en momentos de crisis o angustia; la oración litúrgica y las devociones populares...
Un libro –arriba quedó dicho- vivo, profundo y original y, a la vez, con un sabor de “clásico” que recuerda, por ejemplo -¿porqué no atreverse a decirlo?-, a un fray Luis de Granada.
Notable también la presentación que de esta obra hace el profesor Alfonso López Quintás, entre otras cosas, discípulo y biógrafo de Romano Guardini.