Estrellas amarillas

Escritos autobiográficos de la carmelita descalza alemana, beatificada por S.S. Juan Pablo II como Santa Teresa Benedicta de la Cruz. Nacida en Breslau, en 1891, en el seno de una familia judía. Su autobiografía comprende desde el nacimiento y antecedentes familiares hasta su doctorado en Filosofía como discípula de Husserl.

Ediciones

Edición Editorial Páginas ISBN Observaciones
1973 Espiritualidad
329
1992 Espiritualidad
320
2006 Editorial de espiritualidad
416
978-84-7068-313
Valoración CDL
3
Valoración Socios
3.4
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Esta obra, autobiográfica, fue escrita por orden de las superioras de la hermana Teresa Benedicta de la Cruz (Edith Stein). Su intención era dar a conocer a las religiosas carmelitas la vida y carácter de los judíos, en una época (1934-1939), en que éstos eran cuestionados en Alemania. Por eso la primera parte se titula: Vida de una familia judía. Aquí y allá se encuentran observaciones sobre el carácter y modo de ser de los judíos, siempre referidos a la amplia parentela de Edith Stein. El personaje central es Auguste Courant, madre de la autora, que se quedó viuda con ocho hijos y un negocio arruinado, y lo sacó todo adelante a base de trabajo y carácter. Observante de las tradiciones y festividades del judaísmo, sus hijos se fueron apartando de ellas. Dos de sus hijas, Edith y Rose, se convirtieron al catolicismo y profesaron como carmelitas descalzas. La autora hace dos observaciones sobre el judaísmo: No contempla la vida eterna y las disquisiciones talmúdicas desfiguran el mensaje religioso. Quizá, sugiere la autora, estas circunstancias limitan las ansias del alma religiosa en el judaísmo. Deja constancia del drama de los judíos alemanes, patriotas que enviaron a sus hijos a luchar por Alemania en la Primera Guerra Mundial, y a los que el III Reich negó los derechos sociales, políticos y después la vida. Edith trabajó como enfermera voluntaria en un hospital de infecciosos en la Primera Guerra y murió en la Segunda en el campo de concentración de Auswchwitz. Los estudios de Edith llenan la segunda parte del libro: Yo sentía deseos de hacer algo grande- dice. Y también: Durante una época las ansias de verdad eran mi única oración. Quedan patentes las virtudes de la autora: Trabajo, amistad y desinterés. También los defectos: El espíritu crítico debido a su superioridad intelectual y un progresivo alejamiento de la familia para dedicarse al estudio. Su lectura es interesante por lo que se refiere a la formación del carácter, los estudios universitarios y especialmente la filosofía. En algunas personas puede despertar ideales de estudio y de entrega. También nos hace pensar que si Alemania alcanzó un desarrollo industrial y económico tan importante durante el siglo XX es porque su sistema universitario ya rayaba muy alto a principios de la centuria.