Boy (Relatos de la infancia)

Cuando un hombre es capaz de recordar su infancia como lo hace este autor a los sesenta y ocho años, concluímos que tiene alma de niño. Roald Dahl se hizo conocido en España por las películas "Matilda" y "Charlie y la fábrica de chocolate", basadas en cuentos suyos; sin embargo entre el público de lengua inglesa su obra más conocida es "Boy (Relatos de infancia)". Se trata de una obra infantil en el sentido más propio de la palabra. No un cuento, sino los recuerdos de un niño que se incorpora a la vida con lo bueno y menos bueno que ésta pueda tener.

La heroina del relato, el ángel amable que está detrás del niño es Sofie Hasselberg, joven noruega desposada en Gran Bretaña y madre del Roald. Probablemente ella comenzó a llamarle Boy ("chico") ya que era su único hijo varón. Viuda prematuramente, en vez de recurrir a la solución fácil de volver a su tierra natal donde tenía familia, optó por hacerse cargo de los dos hijos del primer matrimonio de su esposo, de los tres propios y permanecer en el Reino Unido para que tuvieran la mejor educación posible. Ella, anualmente, llevaba a la familia a Noruega y en una frágil barquilla navegaban por el Mar del Norte, regalando así a sus hijos unos veranos inolvidables.

El libro es muy divertido. El autor lo divide en tres periodos en función de las tres escuelas a las que asistió. Entre los siete y los nueve años a la escuela de la Catedral de Llandaff, en Gales. Entre los nueve y los trece en un internado denominado St. Peter's School, en Inglaterra. Y a partir de los trece en una Public School, la Escuela Superior Repton. El autor no deja de señalar las peculiaridades de esos centros de enseñanza, muchos dirigidos por clérigos del estilo del Licenciado Cabra de Quevedo ("La vida del Buscón, llamado Pablos").

Roald rechaza realizar estudios universitarios y a los diez y ocho años ingresa en la compañía petrolífera Shell. Quiere hacer efectivo su sueño de viajar a países lejanos y exóticos. La empresa completará su formación hasta destinarlo a Mombasa, en Africa Oriental Británica. Aquí termina el libro y, precisamente aquí, comenzará otra obra suya excelente, "Volando solo" (ver en cdl), historia de la estancia de Dalh en Africa y, a continuación, como piloto de caza en Oriente Medio y Grecia durante la Segunda Guerra Mundial.