He tenido ocasión de ver recientemente dos películas sobre guerras, “Civil war” y “El ministerio de la guerra sucia”. No me gusta este tipo de películas, prefiero historias más tranquilas, más agradables de ver, que te dejen un sabor atrayente, pero a veces, por razones sociales normales, toca ver lo que les gusta a otros. La verdad es que me cuesta entender por qué a bastante gente les gustan los tiros, las violencias, o imágenes ciertamente desagradables.