El sentido de la realidad

Con el paso de los años y el número creciente de publicaciones en castellano, cada vez es mejor conocida la figura y el pensamiento del historiador de las ideas y especialista en la filosofía del romanticismo alemán, el inglés Isaiah Berlin.

Todavía hace falta una mayor perspectiva para ir asimilando las obras que se han ido dando a conocer al público culto e intelectual, de este autor, pero ya están gozando en nuestro tiempo, en pocos años, de una gran acogida.

Como es conocido, a la gran capacidad de síntesis y discernimiento del pensamiento de Berlín, no le acompañaba a la dedicación a redactar obras completas y sistemáticas, sino que era más bien la petición de conferencias, clases y sesiones en la radio, la que le estimulaba su producción intelectual.

El volumen que ahora presentamos, sobre el sentido de la realidad recoge, como en otras obras publicadas recientemente, conferencias sobre el tema, pronunciadas en la BBC, sobre las ideologías como el marxismo, nacionalismo, romanticismo, etc., aspectos indicativos de las raíces de las ideas que configuraron gran parte del siglo XX.

Como buen historiador de las ideas y al estudiar la realidad nos confirma que "La historia es la descripción de las relaciones de los hombres entre sí y con su entorno; en consecuencia, lo que es cierto respecto de la historia es probable que lo sea también respecto del pensamiento y la acción políticos (62).

En seguida Berlin resumirá contundentemente que "Si conociéramos las leyes, las leyes que rigen la vida social o individual, podríamos operar con ellas utilizándolas del mismo modo que utilizamos otras para dominar a la naturaleza, inventando métodos que expliquen en su integridad tales fuerzas, sus relaciones y costosos efectos. De lo que carecemos es precisamente de esta tecnología social fiable" (73).

Así pues, Berlin bajará al lector a la realidad: "Una de las mayores y más fatales falacias de los grandes constructores de sistemas del siglo XIX, hegelianos y comtianos y, sobre todo, las múltiples sectas marxistas, es suponer que si designamos a algo como inevitable queremos dar a entender la existencia de una ley" (74).

Deteniéndose en el marxismo realizará su desenmascaramiento, pues nadie conoce la primera internacional (181), puesto que: "Lo que Marx creó de hecho fue una nueva organización ecuménica, una especie de antiiglesia, con un aparato completo de conceptos y categorías, capaz, al menos en teoría, de ofrecer respuestas claras y finales a todas las preguntas" (183). Mas adelante nos hablará de sus mártires y de sus herejes (219)

Finalmente nos recordará la importancia de la humildad intelectual para acercarse a la realidad: "Los hombres, como se ha señalado muchas veces (especialmente los pensadores cristianos), no pueden afrontar demasiada realidad" (205)

José Carlos Martín de la Hoz

Isaiah Berlin, El sentido de la realidad. Sobre las ideas y su historia, ed. Taurus Barcelona 2017, 399 pp.