La epistemología de Thomas Hobbes

 

El investigador, filósofo y profesor del Centro Universitario de Humanidades y Ciencias de la Educación, Don Bosco, de la Universidad Complutense de Madrid, Sabino de Juan López, ha tenido el acierto de publicar, resumidamente, las principales aportaciones y conclusiones de su extensa monografía presentada como Tesis Doctoral (9) en la Universidad Complutense acerca de la teoría del conocimiento de Thomas Hobbes (1588-1679), uno de los filósofos más influyentes en la filosofía política desde el siglo XVII hasta la actualidad (13).

Efectivamente, ya desde las primeras páginas, el autor demuestra con autoridad sus amplios conocimientos acerca del estado actual de las investigaciones y temáticas desde las que se está abordando en nuestros días, la eminente figura de este pensador inglés, así como la historia de la influencia paulatina de Hobbes, primero en Inglaterra, luego en Francia e Italia y, posteriormente, en el resto del continente, hasta llegar a nuestros días, donde las ideas contenidas en el Leviatán, son ya moneda común, tema de obligada referencia y punto de partida de muchos asuntos, sobre todo, en el mundo de la cultura política occidental.

Verdaderamente, es difícil entender el origen y la estructura del pensamiento de Hobbes, sin adentrarse en el origen de sus dos principales aportaciones al pensamiento sociopolítico de su país, y a las posibles soluciones: las bases del concepto de Estado y el estado de la naturaleza, que han marcado la formulación de las democracias del mundo actual, sin conocer cómo era la teoría del método que se había planteado el propio Thomas Hobbes, quien había leído en caliente (1637) y se había relacionado con el entorno de Descartes,  autor del discurso del método (17).

Indudablemente, por su formación teológica protestante, pues su padre era pastor, y le habría inculcado desde joven, los elementos de la antropología pesimista acerca de la predestinación, la durísima teologia crucis, y la ausencia del calor de la misericordia, de la caridad y del perdón para establecer el rigor de la justicia divina y la sola scriptura y la sola fides.

Asimismo, es clave, redescubrir en sus textos la escolástica nominalista que ha conocido, aprendido y atacado, primero en Inglaterra y, luego, en sus viajes a Europa, durante el exilio político en Francia o sus viajes a Italia. Lógicamente, en sus ataques a la escolástica nominalista hay referencias al tratamiento juridicista de los temas de Moral y, sobre todo, a la voluntad divina arbitraria en la que se basan, de ahí viene también la dura acusación de ateísmo que recibió.

Finalmente, en sus obras hay una estrecha colaboración en la tarea de liberar a la ciencia experimental de su tiempo, tanto del método de autoridades, adecuado solo para la teología, pero no para una ciencia que necesitaba aire, autonomía y mucha ilusión para avanzar (29). No en vano se había entrevistado en directo con Galileo en su primer viaje a Italia (1630).

José Carlos Martín de la Hoz

Sabino de Juan López, Thomas Hobbes. O la unidad de naturaleza y sociedad, Erasmus ediciones, Barcelona 2019, 195 pp.