Los intereses creados

A una ciudad italiana, en el siglo XVII, llegan dos pícaros, Lorenzo y Crispín, que consiguen embaucar a todo el mundo haciéndose pasar por ricoshombres. Después de haber vivido del crédito y haber derrochado el dinero generosamente, los acreedores empiezan a sospechar el timo y exigen cobrar. La única solución es lograr la boda de Lorenzo con Silvia (hija de Polichinela, el multimillonario del pueblo) pero Polichinela se opone frontalmente. Lorenzo, además, duda por escrúpulos, pues está realmente enamorado. Sin embargo, Silvia, enamorada también, accede a la boda y el pueblo entero les obliga ya que sólo así recuperarán el dinero prestado.