misioneros

Segundo Llorente Villa, S.J. nació en 1906 en Mansilla Mayor (León). Fue hijo de labradores y el mayor de doce hermanos. Con 17 años ingresó en el noviciado de los padres jesuítas y a los 28 fue ordenado sacerdote. Llegó a Alaska en 1935 y dos años más tarde fue destinado por sus superiores a Kotzebue, al norte del Círculo Polar Artico. En 1938 Llorente escribía: "Kotzebue es una aldea de 350 habitantes: 40 blancos ateos, 80 católicos y el resto nada". Alli ejerció su ministerio entre esquimales y antiguos buscadores de oro.

España es la primera potencia mundial en misioneros: hay casi 11.000, repartidos entre los cinco continentes. "No son héroes: es decir, no parten persiguiendo ideales. Más bien obedecen a la llamada de Dios, que les da la fuerza para evangelizar allí donde la Iglesia les envía", explica monseñor Giampietro Dal Toso, presidente mundial de Obras Misionales Pontificias.

Silencio, que al publicarse por primera vez en el Japón fue motivo de apasionadas controversias, obtuvo el prestigioso Premio Tanizaki, fue considerada la mejor novela del año y en poco tiempo había vendido dos millones de ejemplares, es considerada hoy no sólo la novela más importante de Endo, sino también una pieza fundamental para explicar ciertos caminos emprendidos por la narrativa japonesa de nuestros días.

Absalon Sydenstrick, conocido por los suyos como Andrew, fue padre de la escritora y Premio Nobel de Literatura Pearl S.Buck. Nació en 1851 y era el octavo de los nueve hijos de un granjero de Virginia (USA). Perteneció a la confesión presbiteriana (calvinistas) y misionó en China desde 1880 hasta su muerte en 1931. Casado con Carie Stulting, el matrimonio tuvo siete hijos. Misionero incansable recorrió China a pie, en caballería, en tren o en barco. Promovió numerosas comunidades cristianas, escuelas y en Shangai una institución para la formación del clero chino de su confesión.

La llaga de Dios es una novela inspirada en la vida de Fray Junípero Serra –que acaba de ser canonizado por el Papa Francisco en su viaje a Estados Unidos–, en la que su autor, además de recrear los principales acontecimientos de su vida, profundiza en su espiritualidad y sentimientos, ofreciendo al lector un testimonio insuperable para acercarse a la vida, obra y fundaciones del apóstol de California. La novela pretende, con la profundidad de quien anhela dar sentido a su existencia, recorrer los túneles del alma, del dolor, de la alegría, de la d

Es una novela histórica donde se narran dos vidas paralelas La de Tomás Llera -muchacho enviado por su padre a las Indias para buscar fortuna- y Enrique Madrigal -misionero Jesuita que desea hacer el bien en esas tierras-.
Tiene de original con otros libros que hablan de la Conquista de Ámerica que habla del papel positivo que hizo España, aunque a la par también se ve por el otro personaje que hubo abusos