Es muy significativo que las primeras palabras del papa León XIV (Cardenal Prevost, Chicago 1955) no sean referidas a León XIII, al que parece dar continuidad, sino al Papa Francisco puesto que las últimas palabras del Santo Padre anterior en la mañana de la reciente Pascua fueron un vigoroso impulso a la paz en el mundo, aunque no pudiera pronunciarlas él mismo, pero su presencia lo corroboraba.