Hace poco vino a mi casa Miguel, electricista, que nació en Zafra, pero lleva muchos años trabajando por el barrio madrileño de Chamberí, donde vive. Se trataba de arreglar unos timbres que habían dejado de funcionar. Después de una larga y desconcertante búsqueda, llegó a la conclusión de que, en una reparación de albañilería reciente, se había hecho una chapuza que había causado la avería. Al día siguiente, Miguel arregló el desperfecto y dejó la instalación en perfectas condiciones, después de varias horas de trabajo.