Hace unos pocos días nos llegó la noticia del asesinato de niños y profesores en EE. UU. Un muchacho un tanto perturbado, en cuanto pudo conseguir un rifle, en cuanto tuvo mayoría de edad, y por lo tanto posibilidad de matar, termina con una veintena de niños y profesores, con un sentimiento de venganza, por agravios anteriores. A todos nos pareció terrible que alguien, un joven, pueda tener toda la facilidad para ir y asesinar, por odio, por venganza.